La Sedena expuso que con esta última diligencia se cumplimentan las cuatro presentaciones de personal requeridas por la PGR, el 7 de mayo pasado. La investigación de la PGR en torno a los nexos con el narco por el que tres generales y un teniente coronel están bajo sospecha, podría extenderse a otros jefes militares
Sábado 19 de mayo de 2012 | Silvia Otero | El Universal
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dio a conocer que el Teniente Coronel de Caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto fue presentado ante la Procuraduría General de la República (PGR), como parte de la investigación por delincuencia organizada que se realiza contra elementos del Ejército por su presunto nexo con el cártel de los Beltrán Leyva, con lo que suman cuatro los militares asegurados bajo sospecha.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dio a conocer que el Teniente Coronel de Caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto fue presentado ante la Procuraduría General de la República (PGR), como parte de la investigación por delincuencia organizada que se realiza contra elementos del Ejército por su presunto nexo con el cártel de los Beltrán Leyva, con lo que suman cuatro los militares asegurados bajo sospecha.
La Defensa Nacional informó anoche que personal de la Procuraduría General de Justicia Militar, cumplimentó una orden de localización y presentación, a petición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) para que rinda su declaración ministerial.
Se detalló que el Teniente Coronel causó baja del servicio activo el 30 de noviembre de 2002 “por haberlo solicitado”, es decir, desde hace casi una década no pertenece al servicio activo en las filas castrenses, pero existen imputaciones en su contra.
La Sedena expuso en un comunicado que “con esta última diligencia se cumplimentan las cuatro presentaciones de personal requeridas por la PGR”, el 7 de mayo pasado.
El Teniente Coronel Hernández Soto fue en 2008 director de la Policía Ministerial de Sinaloa y en el mismo año también fungió como inspector general de la Policía Federal.
En 2011 era director general de la Agencia Veracruzana de Investigación, dependiente de la procuraduría del estado.
Más bajo la lupa
La investigación que realiza la PGR en torno a altos mandos de las fuerzas de seguridad presuntamente ligadas al cártel de los Beltrán Leyva, por el que tres generales y un teniente coronel están bajo sospecha, podría extenderse a otros jefes militares, pero también a funcionarios de la Policía Federal, revelaron autoridades de la dependencia.
Ayer, el Ministerio Público de la Federación solicitó el arraigo por 40 días en contra del general de División Diplomado de Estado Mayor retirado, Ricardo Escorcia Vargas, quien fue presentado el jueves ante la Subprocuraduría de Investigación Especializada (SIEDO); de concederse la medida cautelar, ingresaría al Centro Federal de Investigaciones, donde están por acusaciones similares el ex subsecretario de la Defensa Nacional, Tomás Ángeles Dauahare y el general de Brigada, Roberto Dawe González.
Sin embargo, las investigaciones continúan para determinar si existen más altos mandos castrenses vinculados a las acusaciones formuladas por testigos protegidos, militares bajo proceso y mandos en activo. Las autoridades consultadas revelaron que se analiza la posibilidad de citar a comparecer al general Leopoldo Díaz Pérez, quien en una averiguación previa iniciada en 2009 es señalado como uno de los jefes militares presuntamente relacionado con el desaparecido Arturo Beltrán Leyva, El Barbas.
Los señalamientos contra el general de división en retiro, derivaron de la operación que realizó la Secretaría de Marina el 16 de diciembre de 2009 en el condominio Altitude, de Cuernavaca, Morelos, en la que fue abatido El Barbas; en el lugar fue detenido el cocinero del narcotraficante, quien en sus declaraciones aseguró que precisamente ese día Arturo Beltrán Leyva se encontraría con el general Díaz Pérez, entonces jefe de la 24 Zona Militar en el estado de Morelos.
Aunque estas declaraciones, en su momento, no impidieron que Díaz Pérez continuará en la Zona Militar hasta julio de 2011, cuando se desató el escándalo de la tortura, homicidio e inhumación clandestina de Jethro Ramsés Sánchez por elementos de un batallón bajo su mando, por el que incluso se solicitó que se procesara al general, aunque nunca se comprobó su responsabilidad y fue removido del cargo.
La PGR investiga la veracidad del testimonio del cocinero de Beltrán Leyva, quien además dijo que junto con Díaz Pérez, presuntamente también estarían en la misma reunión otros dos militares de la 24 Zona Militar.
Detallaron que la indagatoria, a la que consideraron como una segunda fase de la Operación Limpieza, está dirigida contra mandos de la Policía Federal, que en su momento estuvieron asignados en Morelos, que hasta antes de la muerte de El Barbas era un bastión de poder de los Beltrán Leyva.
Las pesquisas en torno a mandos de la SSP federal, se basan en las declaraciones de tres testigos hoy bajo proceso: el ex primer inspector de la PF, Jorge Ricardo Aburto; así como de los suboficiales Antonio Ruiz Alvarado y Carlos Ayerbi Baltazar, quienes estaban a cargo de la seguridad de aeropuertos y pistas de aterrizaje en Morelos.
De hecho, la declaración de uno de los federales, quien estaba al frente de la vigilancia del aeropuerto que se localiza en el municipio de Xochitepec, involucra al general Escorcia Vargas.
Fuente: El Universal
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