De verdad, a mí no me iba tan mal en la Compañía de Luz como con estos sujetos, es que estos le pegaron durísimo. Además, los cambios de medidores, yo no sé qué hago con los medidores nuevos que pensé iban a reestablecer mi situación y ahora -fíjese que tiene que pagar veinte mil pesos
 |
| 10/06/2011 07:33 |
Para reproducir dar click en la imágen
Gracias a Dios que es viernes, aunque hoy, mi querido Nino, veo que nos salió junto con pegado lo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). ¡Dioses!, mi querido Nino, le empiezan a llegar a las personas recibos absolutamente impagables. El día de ayer me habla una mujer de Chalco, de la noche a la mañana, de un bimestre a otro le asestan tres mil pesos, naturalmente estamos hablando de una persona de muy escasos recursos, mi querido Nino, pero no es la única, en días pasados leía que hay ya 66 mil quejas por cobros excesivos.
Nino Canún, titular: 66 mil una.
Catalina Noriega: Imagínate.
Nino Canún, titular: No, la mía. Veinte mil pesos me quiere cobrar éste, el nuevo, ¿se apellida qué?, Vivanco. Pero no sé adónde quejarme por que PROFECO no sirve para maldita la cosa, pero cuando me llegó veinte mil pesos, dije, bueno ¿éste cuate cree que es una fábrica o pensará que es mi casa?
Catalina Noriega: Así está todo mundo, mi querido Nino, te dobletean, te triplican lo que era tu pago, desde la noche a la mañana empezaron con estos cobros inauditos que, reitero, no hay forma de pagar y teníamos esperanzas, todos teníamos esperanzas de que al llegar la Comisión Federal se nos hiciera justicia, por que estas "mamarrachadas" de cobrarte lo que se les da su gana, las hizo siempre la Compañía de Luz y tampoco tenías forma de ampararte, pero mi querido Nino, ha sido algo increíble. Nos dieron primero atole con el dedo los tres, cuatro primeros recibos, llegaron bajos.
Nino Canún, titular: El primero, por que no sabían qué hacer.
Catalina Noriega: Exacto mi querido Nino y ahora de pronto, no a las nubes, lo que le sigue. Encima amenazan con los medidores digitales, unos medidores, mi querido Nino, que se suponen tienen una tarjeta de prepago, como los celulares. Por ahí dicen, quien ha tenido este tipo de medidor en el interior de la República que se las traga, se traga lo que haya depositado de una bocanada, así que, mi querido Nino, estamos en la olla.
Nino Canún, titular: Fíjate que ayer me fueron a cambiar los medidores, me fueron a revisar todas mis instalaciones, por que me dijeron que alguien se robaba la luz, pues, dije: -ustedes-, quiénes más. Bueno, no sabes todo lo que ha sucedido y lo único que dije y creo que eso les molestó, a Martín Esparza, en verdad, bueno, se me hace repugnante todo lo que ha hecho, pero cómo lo extraño. De verdad, a mí no me iba tan mal en la Compañía de Luz como con estos sujetos, es que estos le pegaron durísimo. Además, los cambios de medidores, yo no sé qué hago con los medidores nuevos que pensé iban a reestablecer mi situación y ahora -fíjese que tiene que pagar veinte mil pesos-, dije -está usted loco, veinte mil pesos me voy al pleito y me voy a la huelga de hambre-. Si no es una fábrica, es tu casa ¿veinte mil pesos?
Catalina Noriega: Mi querido Nino así ponen a una señora de la Miguel Hidalgo que pagaba normalmente 900 pesos y ahora le llegó el recibo por once mil y pico, no se puede creer. Lo más grave, mi querido Nino, es que este señor Vivanco que, en primer lugar no tiene idea del tema, se va a ir muy pronto, por que dicen, mi querido Nino, que en cuanto renuncie "el chivo en cristalería", el señor Cordero, en cuanto renuncie van a colocar ahí a José Antonio Meade, actualmente en la Secretaría de Energía (SENER) y entonces pasarán al señor Vivanco a la Secretaría de Energía.
Nino Canún, titular: (Risas).
Catalina Noriega: ¿A qué estamos jugando?
Nino Canún, titular: ¿Es premio o qué? Oye yo estoy igual de preocupado que tú, por que si la PROFECO sirviera para algo, voy y me quejo, pero para perder mi tiempo. Fíjate, yo estaba en cinco, seis mil y me peleaba y ahora veinte mil, que se los pague su abuela. Además no me puedo quejar con nadie, un día dije -¿por qué en Los Pinos no apagan todas las luces?-, todas las lámparas están prendidas durante todo el día y tú dices, ahí no apagan las lámparas y no pagan tanto de luz, me quiero imaginar.
Catalina Noriega: Pues, mi querido Nino, aquí reitero lo grave.
Nino Canún, titular: Ayer estuve sin luz en tu casa las 24 horas.
Catalina Noriega: Qué barbaridad.
Nino Canún, titular: 24 horas.
Catalina Noriega: Apagones larguísimos.
Nino Canún, titular: 24 horas por que estaban trabajando. Trabajaron mucho tiempo, pero tanto tiempo sin luz.
Catalina Noriega: Pero lo peor.
Nino Canún, titular: A ver, Vivanco, ¿me vas a ir a pagar mi jamón que se echó a perder o la leche?
Catalina Noriega: Claro. Si pasas por cualquiera de estas sucursales que han puesto, mi querido Nino.
Nino Canún, titular: Muy dinámicas, parecen bancos.
Catalina Noriega: Sí, llegan las filas a la calle y te dicen exactamente igual que como te decía la Compañía de Luz. Primero pague y luego. Mi querido Nino, tú que tenías esperanzas. Los del centro que teníamos esperanzas, les salieron alas.
Nino Canún, titular: Pues sí, ni modo, a ver cómo la pasamos y cómo la sufrimos con velitas ¿no?
Catalina Noriega: Tal cual.
Nino Canún, titular: Tal cual. Doña Catalina, mucho gusto.
Catalina Noriega: Igualmente, mi querido Nino y, que pase muy buenos días.
Nino Canún, titular: Igual Doña Catalina Noriega.
Nino Canún, titular: Ahorita que estaba yo viendo lo de la COFETEL, dice el líder del sindicato que a Telmex se le echó encima el gobierno, pues yo creo que a nosotros también se nos echó encima el gobierno con estos recibos de luz. Yo no sé con quién quejarme, de verdad, si usted sabe de alguien que le entienda esto, por que va usted a la PROFECO y no lo pelan, va usted a la Compañía de Luz, ya no existe, va a la Comisión Federal de Electricidad y le dice: -¿cómo se llama la fábrica?-, -cuál fábrica güey, si es mi casa-.
