Al quedar desempleado se ha dedicado a luchar por recuperar su empleo como electricista de la CL y FC. Hoy para sobrevivir vende en Zócalo del DF documentales realizados por él mismo.
Mario Ríos, electricista y vedeoasta
(Entrevista)
Casi en medio del zócalo, frente al asta bandera y cerca de un gigantesco cúmulo de zapatos retorcidos y desgastados que miles de personas han donado, para que en su momento le sean arrojados al señor que despacha al otro lado de la calle, en Palacio Nacional, está ubicada la tienda de campaña y changarro de Mario Ríos, hermano de Miguel Márquez Ríos, preso político del Sindicato Mexicano de Electricistas.
Mario, que al momento de la liquidación de L uz y Fuerza del Centro (L y FC) tenía 20 años trabajando era Mecánico “A” y ganaba 196 pesos diarios, nos dice que Miguel Márquez Ríos es su hermano, y agrega “No voy a descansar hasta sacarlo”.
Mario, que al momento de la liquidación de L uz y Fuerza del Centro (L y FC) tenía 20 años trabajando era Mecánico “A” y ganaba 196 pesos diarios, nos dice que Miguel Márquez Ríos es su hermano, y agrega “No voy a descansar hasta sacarlo”.
Narra indignado cómo fue aprehendido el 21 de octubre del año pasado “lo detuvieron como si se tratara de un terrible criminal, participaron 200 efectivos del ejército, la PF, estatal, la municipal y lo tundieron a golpes. Estaba en Puebla, había ido a entregar al Congreso del estado, el proyecto por el que estamos peleando, para que se cree una empresa que sustituya a la Compañía de Luz y Fuerza del Centro. Cuando iba de regreso rumbo a Pachuca lo agarraron en la caseta de San Martín Texmelucan. Ahora está en el Cereso de San Martín Cholula”.
“Lo acusan de privación ilegal de la libertad de los policías federales - en Necaxa, Puebla, el 16 de marzo, cuando se hizo una huelga simbólica, donde se toman la instalaciones, pero en un plantón permanente por fuera de las instalaciones de la CL y F. De ahí viene la demanda de supuesta privación ilegal de la libertad de esos policías.
“Mi hermano tiene 43 años (9 de octubre) y era el subsecretario de Divisiones en Necaxa, que es la cuna de la industria eléctrica. Ahí comenzó la historia de la industria en 1895 y se construye en 1906. El 31 de diciembre a las 3 de la tarde se enviaba el fluido eléctrico de Necaxa al DF.
“Yo soy de Necaxa, aunque vivo aquí en el DF, pero mi corazón es de allá. Necaxa es tierra de valientes. Allá cayeron los franceses, el ejército suabo, el más poderoso de la tierra.
- ¿A su juicio qué hace falta para que su movimiento logre triunfar?
-Sobre todo que mantengamos la unidad. Con la unidad se fortalece el movimiento y se hace sólido y los golpes se sienten menos. Por ejemplo para sostener este plantón nos vamos turnando. Aunque muchos compañeros por necesidad han tenido que buscar empleo y otros aquí nos ganamos el pan. Yo –al igual que muchos compañeros y compañeras que estamos en el plantón- me gano un dinero vendiendo algo.
Yo, mis videos de documentales y música. Algunos yo mismo los he producido. He aprendido cómo hacerlos, me compré mi computadora y me puse a aprender. No sabía editar y mira ya le agarré la onda. Nos salió otro talento que teníamos escondido ¿no? También me dedico a filmar fiestas de 15 años y bodas. Cobro 700 pesos el evento. Regalado, otros cobran 5 mil pesos.
-¿Qué más ha aprendido en este movimiento que lleva ya 19 meses, respecto a lo que es el gobierno mexicano, los partidos políticos, el sindicalismo mexicano, el mismo pueblo?
- Tengo 45 años y por lo poquito que he leído y los documentales que he visto creo que los mexicanos hemos sido muy agachados, conformistas, se nos ha olvidado apoyarnos como pueblo. Respecto al sindicalismo, creo que esta en agonía. Pero el SME va a levantar, eso sí te lo digo.
Respecto a la acusación que hicieron los medios de comunicación contra el SME de ser responsable de la quiebra de la CL y F explica: “Los privados le vendían a la CFE a 1.90 el kilowatt de electricidad y la CFE nos la vendía a nosotros a 1.55 y la secretaría de Hacienda nos la hacía vender a nosotros a 1.35. En realidad los “privilegios” que teníamos pues no eran tales, porque en 1975 se hizo una especie fideicomiso con el dinero de los trabajadores en donde nosotros como activos pagábamos la jubilación por adelantado, las prestaciones también salían de ahí. Al pueblo nunca le arrebatamos nada.
Continúa: Desgraciadamente la gente se deja llevar por lo que mira en la televisión. No se informa aquí que hay mesas informativas. La gente pasa y nos insulta. Ya quisiera ver a esa gente que nos critica mantener a sus familias sin un trabajo estable. Nosotros lo hacemos honradamente. Calderón nos quiso ver en la calle, pos aquí estamos ¿no?
--- ¿Sus antepasados trabajaron en la Compañía?
-Todos. Desde mi abuelo. Y nadie se ha liquidado. Yo estudie la prepa. Intenté entrar a la UNAM y no quedé y luego en el Poli y de suerte entré a la CL y F después de estar pegado en el sindicato 6 meses casi las 24 horas ahí estuve, más bien vivía ahí afuera, así como ahorita. Nadie me cobró, nadie me sacó dinero.
-Me llama la atención la fuerza de sus convicciones y su espíritu de lucha. ¿Cómo hace para sostenerse en ese estado de ánimo?
-Mire yo soy muy depresivo. Pero a raíz de la injusticia que nos hizo el gobierno me he ocupado. Me he dedicado al video y sigo aprendiendo más cosas. Y aquí con la gente, platicando, con los que pasan vendiendo pepitas, nos dicen que le echemos ganas, que vamos a salir adelante y aunque ahorita estamos así, sabemos que vendrán tiempos mejores. Todo el tiempo tengo la mente ocupada. No le doy tiempo a la depresión. Aquí he estado en los tres meses que lleva el plantón, de 8 de la mañana a 8 de la noche.
- ¿Qué opinión tiene del otro sector que se liquidó, tiene caso llamarlo, porque ellos siguen siendo miembros del sindicato en receso?
-Yo sí llamaría a todos a la unidad. Aún a los que se liquidaron. Si queremos ganar, tenemos que llamar a la lucha unitaria no nomas a los liquidados, sino a todo el pueblo.
-¿Podría decirse que los que se liquidaron lo hicieron por falta de preparación para enfrentar una situación como está, que el Sindicato no los educó políticamente?
-No hubo conciencia de clase ni amor por su sindicato ni por su trabajo. Es como si tu papá te hereda una casa que hizo con sacrificios y tú la vendes. Pues no, tienes que defenderla y si puedes hacer otra casa para tu nieto. Ahorita muchos de ellos están arrepentidos.
-¿No le han cumplido las promesas que les hicieron de darles otro empleo, de apoyarlos para que se convirtieran en dueños de un negocio?
-Para comenzar no les dieron liquidaciones, sino renuncias voluntarias. Dicen que les dieron bonos, pero no es cierto, ese bono era de su propio dinero. Iban tan cegados que llegaban a firmar y era su renuncia.
-¿Qué información tiene de los que en Necaxa se liquidaron, qué resultado han tenido?
- La mayoría ha fracasado. Por ejemplo un compañero de Huauchinango, que se liquidó, compró un camión de mudanzas y al otro día se lo robaron y se suicidó. Otro compañero de Beristaín también se dio un balazo en la cabeza. Un compa que anduvo pidiendo trabajo y acabó ahorcado hace como 5 meses. Uno muy allegado a la familia, fue a cobrar su cheque de liquidación y lo estaban esperando para robárselo. Hay 15 compañeros que se han quitado la vida, de los que estamos en resistencia. De los liquidados yo calculo que como 10, o tal vez más.
“Hay que tener dignidad. Nos faltaron al respeto y nos lo vamos a ganar aunque sea a madrazos, si no hay de otra. Los electricistas debemos entender que si le pegan a uno nos pegan a todos. El día que pesemos así, vamos a ganar.
Tal vez Mario no ha leído al Che Guevara, quien decía que un revolucionario debía Indignarse ante cualquier injusticia cometida contra un ser humano en cualquier parte del mundo. Pero siente en carne propia las felonías cometidas contra otros, como el argentino cubano asesinado por la CIA en 1967 en Bolivia. Y nos cuenta de su encabronamiento ante lo que observa ahí en el corazón de México: “Aquí en el zócalo hay compañeros ambulantes, gente que ni conozco, gente que se viene a ganar la vida decentemente, pero hay un convenio del gobierno del DF con el SME de que nomás nosotros podemos vender, pero la lucha es de todos y hay que defender a los que no tienen.
“Hace unos días se llevaron a una señora y su niña llorando y paré al policía y le dije ¡oye cabrón! ¿No te duele ver a la chavita llorando? Y me dice el poli que esa niña me puede venir a robar a mí y le digo: el bando eres tú hijo de la chingada y ya me iba a agarrar a madrazos y nadie se me acercó a hacerme el paro. Así cómo vamos a agarrar si no nos unificamos. Llevo tres meses aquí en el zócalo y he visto muchísimas marchas y son movimientos aislados, así nunca vamos a ganar.
- ¿Con lo que ha hecho el sindicato cree que se va a ganar?
-El SME siempre ha sido maduro y mi punto de vista personal es que hoy dependemos del PRI cuando sabemos que durante 75 años ese partido saqueo al país. Yo no confío en el PRI. Yo pienso que nuestro secretario general debería abocarse a ganarse al pueblo, a los mismos agremiados, unificarnos nosotros mismos e iniciar un movimiento más contundente. Yo sugiero que se haga una buena asamblea de jubilados, somos 22 mil, cuando menos jalar a la mitad y jalar a los 16,900 y hacer algo más cabrón e invitar a algunos sindicatos y si le van a entrar pos que le entren. Por ejemplo la sección 22, grupos campesinos que han dicho que ya es tiempo de madrazos”, concluye.
No hay sombra en el Zócalo. El tiempo parece suspendido. Un hombre semidesnudo, vestido con los restos de un pantalón, yace dormido en el suelo junto al mar de zapatos.