martes, 22 de marzo de 2011

Abandonados a su suerte electricistas

Reprocha disidencia del SME al gobierno falta de opciones laborales
Sólo 8 de 68 empresas conformadas ha obtenido contrato de trabajo, denuncia
por Ana Luisa Guerrero
El líder de la disidencia del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Alejandro Muñoz, reprochó al gobierno federal la falta de opciones laborales para los ex electricistas que se liquidaron, pues hasta la fecha sólo 8 por ciento de ellos ha podido reinstalarse en las opciones de trabajo que les fueron prometidas.
Tras la extinción de Luz y Fuerza del Centro, la administración calderonista prometió dar opciones de empleo a los trabajadores, y hasta ahora sólo ocho de las 68 empresas conformadas ha obtenido contrato de trabajo.
“A los trabajadores que optamos por la vía pacífica y la conciliación se nos aseguró que seríamos recontratados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) o que se nos darían contratos para dar servicios a la paraestatal; eso se quedó en el discurso, pues no se ha cumplido con el compromiso”, dijo.
Ante la falta de respuesta, el también líder de Transparencia Sindical, que aglutina a más de 7 mil ex trabajadores y jubilados, amenazó con realizar marchas, instalar plantones y hasta iniciar una huelga de hambre con tal de que el gobierno, a través de la Secretaría de Gobernación, cumpla con lo establecido.
En rueda de prensa, Muñoz refirió que, tras la extinción de Luz y Fuerza, la CFE sólo ha contratado a 2 mil 596 ex trabajadores, cuando prometió reintegran al menos a 3 mil.
Asimismo, sólo 564 han sido colocados a través del Sistema Nacional del Empleo y 200 laboran en empresas conformadas por ex trabajadores.
En su oportunidad, Gabriel Aguilar, responsable de una empresa de poda creada tras su liquidación, expuso que las ocho asociaciones creadas y contratadas por el gobierno federal solamente reciben contratos minúsculos, cuando a cerca de 4 mil empresas privadas se les dan contratos de más de 2 mil 940 millones de pesos.
“La Secretaría de Economía pretende tomarle el pelo a los trabajadores, a la opinión pública y al Presidente, pues más de 60 empresas permanecen sin operar”, apuntó.