La inflación llegó a 4.40%, principalmente por aumentos en transporte y gasolinas
Susana González G.
Periódico La Jornada
Sábado 8 de enero de 2011, p. 22
Los consumidores en México sufrieron un mayor incremento de los precios en 2010, respecto a 2009; incluso el aumento de 4.40 por ciento en el índice nacional de precios al consumidor (INPC) fue mayor al pronóstico de analistas y de la meta del propio Banco de México (BdeM).
Tan sólo el año pasado hubo productos que más que duplicaron su cotización, como el limón, cuyo aumento fue de 142 por ciento. Los precios de la canasta básica de consumo aumentaron 4.19 por ciento en 2010, contra 3.57 por ciento de un año antes.
El transporte fue uno de los rubros con mayor incremento, así como las gasolinas y cigarrillos.
Las mayores presiones provinieron de los productos agropecuarios y los ajustes en los precios de los energéticos.
Tan sólo en diciembre los alimentos se encarecieron un punto porcentual respecto de noviembre, el doble de 0.50 por ciento que en general subió el índice nacional de precios al consumidor (INPC), cifras por arriba de los pronósticos de especialistas.
Aún así, Manuel Ramos Francia, director de investigación económica del banco central, aseveró que el BdeM mantiene su pronóstico de inflación de 3 por ciento para 2011; confió en que se alcance a mediados de año y descartó que el alza mensual a las gasolinas y diesel modifiquen dicha meta.
Además de la tortilla, cuyo precio se encareció 2 puntos porcentuales, otros alimentos que también subieron de precio durante el último mes de 2010 fueron: el limón en 76 por ciento, el chayote en 36 por ciento, la uva en 22 por ciento, el tomate verde en 18 por ciento, los nopales y el plátano 10 por ciento. En contraparte, el jitomate que tiene un peso muy importante en la medición de la inflación, bajó de precio en 8.59 por ciento al igual que los chiles y la papaya, que se vendieron 24 y 12 por ciento más baratos que en noviembre.
Apenas el jueves pasado, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) reveló que México es el cuarto país con mayor inflación entre las 34 naciones que integran el organismo –con una tasa sólo superada por Turquía, Estonia y Grecia–, debido al alza de combustibles y alimentos.
También en esta semana, la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) reportó que los alimentos alcanzaron un nuevo récord de aumentos en diciembre, superior al nivel alcanzado en 2008 y advirtió que la escalada de precios podría empeorar el primer semestre de 2011.
A las alzas de alimentos detectadas por el Banco de México en diciembre, se suma el aumento adelantado en el precio de los cigarrillos (8 por ciento más), ya que estaba previsto que comenzaran a venderse más caros pero a partir de este mes como consecuencia de los nuevos impuestos que se aplicarán a la industria tabacalera. En tanto, los servicios turísticos en paquete subieron 8 por ciento, el transporte aéreo 6 por ciento y la gasolina uno por ciento.
Si se eliminan los productos más volátiles en el comportamiento de precios para considerar únicamente la llamada inflación subyacente de diciembre resulta que aumentó 0.47 por ciento, cuando en noviembre fue de 0.25 por ciento.