Fabiola Martínez
Periódico La Jornada
Domingo 26 de diciembre de 2010, p. 16
El subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación (SG), Juan Marcos Gutiérrez, aseveró que tras el reconocimiento a Martín Esparza como secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) hay un avance importante para resolver ese conflicto, aunque admitió que persiste un rezago amplio en cumplimiento de promesas para dar empleo a la mayoría de los ex trabajadores de Luz y Fuerza del Centro que fueron liquidados.
Hoy el sindicato, guste o no a alguna de las partes, ya tiene su representación y puede continuar con su vida interna. Ya estamos claros: el SME en su pista y nosotros como gobierno con el compromiso con los ex trabajadores liquidados, señaló.
El funcionario dijo que lo importante es que hay mecanismos de diálogo abiertos y eficientes, entendido esto no como simple varita mágica, sino por el reconocimiento de nuestros interlocutores de que hay avance, pese a que en algunos casos pueda haber pequeños retrocesos o lapsos en suspenso.
Según el subsecretario, la toma de nota a Esparza y su grupo, y de manera paralela la negociación con Alejandro Muñoz (disidente) para la entrega de contratos, con base en los cuales se puedan generar alternativas laborales para los ex trabajadores, son pruebas de la eficiencia en el diálogo.
Aclaró que si bien hasta el momento sólo hay soluciones parciales, éstas son parte de un proceso que requiere paciencia.
El secretario del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano, celebró que el proceso de elección de dirigentes en el SME se haya realizado con base en la legalidad interna de este gremio y respetando el laudo de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje.
Por tanto, dijo, “nosotros como autoridades administrativas tenemos la obligación de reconocer a esa nueva directiva (encabezada por Esparza).
“Siempre hemos pensado igual y siempre hemos exigido lo mismo. El cambio más bien vino de la parte del sindicato, porque hace un año, lejos de acatar el laudo de la junta, decidieron irse al amparo y a las movilizaciones. En julio, lejos de respetar los estatutos, se fueron a una asamblea a mano alzada y a las movilizaciones.
Ahora tenemos un proceso electoral cuidado por notarios y validado por la junta. Entonces, (en la STPS) no tardamos ni dos horas (para entregar la toma de nota), porque no había necesidad de cotejar nada. De tal manera que si algo celebro es que dentro de esa resistencia, dentro de esa lucha del SME, hayan optado por regresar al camino de la legalidad, expresó Lozano.
Fuente: La Jornada