La ANUEE despide el 2017 con la guardia en alto frente a las reformas estructurales suscritas por los vende patrias.
Las privatizaciones de los bienes nacionales y los servicios públicos, junto con las miserables condiciones salariales constituyen una verdadera calamidad para la economía de millones de hogares mexicanos.
Los efectos de la pobreza neoliberal alcanzan el abismo y la desolación de más de diez millones de Indígenas, hombres, mujeres, jóvenes, ancianos y niños que heredaron esta tierra antes de la llegada de los españoles con sus enfermedades y su "modernidad" que solo sirvió para despojarlos de sus territorios y riquezas.
Los efectos de la pobreza neoliberal condenan a la sociedad a morir de enfermedades curables por el simple hecho de no tener dinero para seguir un tratamiento médico.
Los efectos de la política neoliberal condenan a más de 35 millones de jóvenes en nuestro país a un futuro incierto lleno de violencia, precariedad laboral y falta de oportunidades para acceder al estudio, salud, cultura y recreación.
Los efectos de la pobreza y la corrupción condenan a más de 12 millones de adultos mayores a sostener una vejez precaria, mientras sus ahorros son utilizados para pagar deuda pública.
Los efectos de la pobreza y la privatización de la energía eléctrica rayan en lo criminal, ya que en la intimidad de los hogares mexicanos tienen que decidir entre comer o pagar el recibo de luz.
Los efectos de la pobreza y la corrupción están en los costos de las gasolinas que disparan los precios del transporte y los alimentos.
Los efectos de la pobreza están en los costos del gas para uso doméstico que transforman un producto indispensable en artículo de lujo.
Los efectos de las privatizaciones están en los recibos que comercializan el agua que se supone un derecho humano.
En la ideología neoliberal, está el mandamiento de la autoridad a acatar leyes injustas, en el discurso de los medios para justificar la explotación y convencer al obrero de que protestar es de mal gusto porque las cosas son así, porque según ellos es normal que en la sociedad siempre hay ricos y pobres.
En la ANUEE terminamos un 2017 satisfecho de actividades, abundantes manifestaciones de repudio a las políticas neoliberales con tomas simbólicas de Gasolineras, de instalaciones de la CFE, de la PROFECO, de la PGR, de la Secretaría de Gobernación, de palacios Municipales. Se realizaron Foros informativos, marchas, mítines, un plantón de 46 días, miles de asambleas de usuarios, millones de carteles y volantes, en una lucha que apenas empieza.
La ANUEE propone al pueblo y a las organizaciones de la sociedad civil a participar en la jornada de desobediencia civil para desconocer al poder legislativo, informando, colaborando, compartiendo, movilizándose, en fin, gritando en las calles y las plazas públicas la importancia de construir la unidad del pueblo a partir de la legislación popular.
La ANUEE propone una serie de iniciativas de leyes y consensos desde abajo, para darnos voz a los sin voz y presencia a los invisibilisados.
Desde aquí, felicitamos a todas nuestras compañeras y compañeros usuarios y al pueblo en general por todo el trabajo compartido, para que este año 2018 que está por comenzar, sea un buen año que nos permita continuar con nuestros trabajos para recuperar la dignidad secuestrada.
¡Que viva la ANUEE!
Comisión de comunicación social, prensa y propaganda de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica ANUEE
