martes, 8 de abril de 2014

Detienen a activista opositor al gasoducto Morelos, cuando salia de Comisión de Derechos Humanos de Puebla

8 abril 2014 | Martín Hernández Alcántara | La Jornada de Oriente
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) detuvo esta tarde a Juan Carlos Flores Solís, representante del Frente de Pueblos en Defensa del Agua y de la Tierra de Puebla y Tlaxcala (FPDATPT), que se opone al proyecto del gasoducto Morelos. La aprehensión del activista sucedió a un día de la detención de a luchadora social Enedina Rosas Vélez, comisariada ejidal del San Felipe Xonacayucan, quien también forma parte del frente y ha tenido una destacada participación en las movilizaciones contra el gasoducto.
De hecho, Flores Solís fue detenido a la salida del edificio de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla, a donde había acudido con una quincena de compañeros a tramitar una queja por la detención de Enedina Rosas Vélez, al filo de las 16 horas.

“A unos pasos de las instalaciones de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla, ubicada en la 50 Sur esquina 5 Poniente, Juan Carlos y los compañeros miembros de la delegación fueron interceptada por 4 autos blancos (sin placas, ni logos de alguna institución), de los cuales bajaron 12 hombres vestidos de civiles, los cuales de forma directa y violenta sometieron al defensor Juan Carlos Flores Solís y forcejeando y empujando lo subieron a un auto y se lo llevaron, sin señalar quiénes eran, ni por qué lo detenían, ni a dónde lo llevarían”, expresó el FPDATPT en un comunicado.

“Horas más tarde, uno de los compañeros del frente recibió una llamada, desde el número del celular de Juan Carlos, un hombre no identificado habló y dijo que el defensor de derechos humanos estaba detenido en la Procuraduría Estatal de Puebla y que sería inmediatamente trasladado a un Cereso. Eso fue todo, por más que se le pregunto a la persona que llamó, no dio más información”, se agregó en el documento.

Sin embargo, hasta las 22:15 horas de este lunes, Flores Solís permanecía incomunicado y no se habían dado “a conocer los motivos del por qué de su detención ni su paradero. Una comisión se dirigió al Cereso de Cholula y ahi se le informó que se encontraba en el MP de Cholula”, finalizó el comunicado.

Antes de que se conociera la detención de Juan Carlos Flores Solís, el Movimiento de Regeneración Nacional emitió un comunicado condenando la aprehensión de Enedina Rosas Vélez:

“El fin de semana pasado, el gobierno de Rafael Moreno Valle continuó dando muestras de su vocación autoritaria, represiva y neoliberal. El sábado 5 de abril a las 10 de la noche un grupo numeroso de policías estatales irrumpió en el domicilio del Comisariado de Bienes Comunales Avelino Velázquez Tapia, situado en la comunidad de San Juan Amecac, municipio de Atzizihuacan. El objetivo del operativo policial era arrestarlo. Al no encontrarlo procedieron a destrozar su vivienda y a atemorizar a su familia. Al día siguiente, domingo 6 de abril, al término de una reunión de Comisariados Ejidales en la localidad de San José Teruel, Municipio de Tepeojuma, otro grupo de policías estatales capturó a la luchadora social Enedina Rosas Vélez, Comisariada Ejidal de San Felipe Xonacayucan. La detención fue ilegal porque los captores no se identificaron ni presentaron orden de aprehensión alguna y amedrentaron con armas de fuego a las personas que presenciaron tal captura.

“Para la Secretaría de Derechos Humanos y Sociales del Comité Ejecutivo Estatal de Morena en Puebla, los actos represivos forman parte de una campaña de terror que se está observando sobre todo en las áreas rurales de la entidad. El propósito de tales actos de aterrorizamiento (sic), es desarticular la creciente resistencia que en diversos lugares del estado, se está observando en contra de los proyectos de muerte que el gobierno impulsa en materia de construcción de minería a cielo abierto, hidroeléctricas, proyectos carreteros, gasoductos y otros más. La violencia que está impulsando el gobierno de Moreno Valle está al servicio de las grandes empresas locales y extranjeras que quieren depredar tierra y territorio en función de las grandes ganancias que esperan obtener o que ya están obteniendo gracias a dichos proyectos de muerte. Vivimos pues un gobierno que así como reprime violentamente en las áreas rurales igualmente impone con el mayor de los autoritarismos reformas a la Ley de Aguas o impone leyes como la Ley Expropiatoria”.