sábado, 7 de diciembre de 2013

Captura de Gordillo y reforma educativa desatan ola de jubilaciones


7 diciembre 2013 | La Redacción | Proceso
MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- La detención de la exlideresa magisterial Elba Esther Gordillo y la aprobación de la reforma educativa, desataron una fiebre de jubilaciones entre los maestros en los últimos meses.
De acuerdo con el diario Reforma, en los años 2011 y 2012 en promedio 25 profesores al día optaban por la jubilación. Sin embargo, tres meses después de la captura de Gordillo –a finales de febrero pasado– y luego de la entrada en vigor de la reforma educativa, se elevaron a 116 jubilaciones diarias.

En los primeros nueve meses de 2013, aproximadamente 20 mil maestros se jubilaron a través del Fondo de Retiro de Trabajadores de la SEP (Forte), indican reportes de la Secretaría de Hacienda.

Dicha instancia reportó que destinó 2 mil 300 millones de pesos a las jubilaciones durante ese periodo.

Marchan maestros en repudio a la reforma educativa. Foto: Hugo Cruz

Según David Calderón, director de Mexicanos Primeros, la ola de jubilaciones se debe a una reacción a la reforma educativa ya que los maestros prefieren retirarse a estar sujetos a los nuevos procesos de evaluación y capacitación.

Dijo que entre los profesores prevalece la falta de información sobre la reforma educativa, ya que piensan que la evaluación es fulminante y no hay manera de mejorar su práctica docente.

En tanto que Eduardo Pérez Saucedo, presidente de la Unidad de Estudios de la Seguridad Social y del Trabajo (UESST), consideró que los maestros están presionados por la aprobación de la Ley General del Servicio Profesional Docente.

La Ley del ISSSTE indica que un docente puede jubilarse a los 30 años de servicio para el caso de los hombres y 28 para las mujeres y/o al cumplir los 53 años y 51 años, respectivamente.

La Encuesta de Opinión de los Docente de Educación Básica que la Universidad Pedagógica Nacional realizó en 2010, arrojó que el 30% de los profesores está en condiciones de jubilarse.