sábado, 20 de abril de 2013

Igualar cuotas patronales con ISR, positivo, pero insuficiente para el IMSS: académicos

Detrás de la reforma hay un plan de cobertura universal mercantil, dice profesora de la UAM
¿Qué pasará con el instituto si se gravan los fármacos?, plantea el especialista Gustavo Leal
Laura Poy Solano | Periódico La Jornada | Sábado 20 de abril de 2013, p. 14
Especialistas en el sector salud señalaron que la reforma a la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) –con la que se pretende homologar las aportaciones obrero-patronales con el pago del impuesto sobre la renta (ISR)– es una iniciativa “positiva, pero insuficiente para afrontar su debacle económica”, pues estimaron que sólo se incrementarían sus recursos en 3 mil millones de pesos.

Presentada por el PRI en la Cámara de Diputados, con el abierto rechazo de la cúpula empresarial, investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) advirtieron que la discusión se da en un contexto en que las modificaciones laborales y las que se aprueben en materia hacendaria, “van a golpear aún más las debilitadas finanzas del IMSS”.

Problemas estructurales

En entrevista por separado, Oliva López Arellano, experta en políticas de salud y profesora-investigadora de la UAM, alertó que de aprobarse esta reforma “no va a resolver los problemas estructurales del IMSS”.

Afirmó que es justo que reciba estos recursos, pues corresponden a lo que deberían aportar las empresas, “pero no podemos soslayar que tras esta iniciativa hay un claro interés del PRI por tratar de sanear, aunque sea de forma mínima las finanzas del IMSS, de cara a un proyecto de largo plazo en su política de salud”.

Se busca capitalizar al instituto, explicó, “básicamente en el área de atención médica, para después impulsar un proyecto de cobertura universal que en realidad es un modelo de mercado que busca impulsar la creación de redes de atención público-privadas, “donde se compite por ver quién se queda con el mayor número de clientes, ya no de personas o derechohabientes. Es un modelo con una lógica de mercado”.

Agregó que este esquema “castiga a los ancianos y a los enfermos crónicos, pues cada potencial cliente lleva consigo etiquetado un gasto en servicios de salud, por lo que se prefiere atender a los jóvenes y sanos que no requieren de grandes inversiones médicas, como ocurre en el modelo colombiano y chileno”.

Gustavo Leal, especialista en políticas de salud e investigador de la UAM-Xochimilco, destacó que se trata de una iniciativa impulsada por el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, y por las autoridades del IMSS, en la que “aún se desconoce cuál será el impacto para el bolsillo del trabajador y cuánto para el patrón, aunque la oposición de estos últimos nos alerta que se trata en realidad de un mayor peso para el sector empresarial”.

Si bien, reconoció, la reforma busca reducir la evasión de cuotas patronales, el problema de fondo es la “propuesta de Enrique Peña Nieto de cobertura universal, en la que se incorpora un catálogo de prestaciones en materia de salud a la baja, y cabe preguntarnos qué pasará con el IMSS si se aprueba una modificación hacendaria que imponga impuestos a medicinas y alimentos. Se trata de un tsunami financiero, porque se suma el tema laboral donde el pago por hora de los más jóvenes tendrá un efecto devastador en las cuotas que pueda recibir el IMSS”.

Fuente: La Jornada