domingo, 21 de octubre de 2012

Calderón miente, no terminarán los “cobros excesivos” ni CFE es eficiente

19 octubre 2012 | de Humberto Montes de Oca
Articulo en respuesta a las declaraciones de ayer de FCH
Sabedor del creciente descontento en contra de los cobros excesivos de Comisión Federal de Electricidad (CFE) y del mal servicio que presta en el centro del país -solamente entre enero y mayo de este año acumula 5 mil 271 quejas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco)- Felipe Calderón demagógicamente anunció el día de ayer un ajuste mínimo al esquema tarifario como solución a un problema que ha desatado miles de protestas en todo el país.
Su propuesta se reduce a que “los primeros 75 kilovatios tendrán el mismo costo de 75 centavos, mientras que el costo entre los 76 y 140 kilovatios será de 90 centavos (y no de 1.25 pesos como es ahora). A partir de aquí, el costo por kilovatio será de 2.65 pesos, por igual”. Esta reducción sólo significa un 7 por ciento del promedio de facturación, dejando intacta la tarifa de alto consumo (DAC) que es la que más afecta a toda la población y sin mencionar que durante su sexenio los cobros se han incrementado hasta en un 700 por ciento.

Es evidente que este insignificante paliativo no va a detener las protestas de millones de usuarios que ante la alternativa de “pagar la luz o comer”, optan por organizarse y declararse en virtual huelga de pagos.

Tampoco va a detener las protestas por el mal servicio que las empresas contratistas y CFE prestan en la zona de Luz y Fuerza del Centro. El desconocimiento del funcionamiento de nuestros equipos y líneas de conducción han ocasionado cientos de explosiones, la destrucción de equipos costosísimos y, sobre todo, la muerte de más de treinta trabajadores y decenas de heridos por ser irresponsablemente enviados a realizar labores que desconocían. Esto es un verdadero homicidio industrial.

La verdadera situación de CFE

Como es habitual en Calderón, cuando habla de CFE, lanza elogios desmedidos hacia los 98 mil trabajadores de esta empresa, afiliados al Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM). Estos elogios equivalen una “sobadita en el lomo” que tiene dos propósitos: asegurar su respaldo en su intento de aniquilar al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), mientras prepara el terreno para asestarles una puñalada por la espalda.

Con su torpe retórica, Felipe Calderón abundó el día de ayer “Al inicio del sexenio, además, yo quiero reiterarlo, porque es un dato bien importante que vale la pena aquilatar, recibimos un sector eléctrico con dos empresas: Una buena, que es Comisión Federal de Electricidad, y una, no tan buena, que era Luz y Fuerza del Centro, que representaba, hay que decirlo, también, con claridad, un lastre para la economía nacional, no sólo por los 50 mil millones de pesos al año que nos costaba de subsidio, arriba de las tarifas que con todo y copete y con todo exceso, y con todo y brinco le cobraban a los usuarios, 50 mil millones de pesos, sino por la ineficiencia en las contrataciones, en los apagones y todo.” 

En primer lugar le aclaramos que no “recibió dos empresas”, sino dos organismos públicos descentralizados encargados del sector eléctrico. La diferencia es sustantiva. Las empresas tienen como fin el lucro. Los organismos públicos descentralizados tienen como objeto: “la realización de actividades correspondientes a las áreas estratégicas o prioritarias; la prestación de un servicio público o social; o la obtención o aplicación de recursos para fines de asistencia o seguridad social” (Ley Federal de las Entidades Paraestatales, artículo 15).

Es completamente falso que los 50 mil millones de pesos con que supuestamente se subsidiaba a Luz y Fuerza se dedicaran a paliar sus deficiencias o peor aún, como dolosamente ha insistido Calderón, al pago de salarios y prestaciones de los trabajadores del SME. La nómina total, de activos y jubilados, ascendía a 12 mil millones de pesos, los 50 mil millones de pesos eran subsidio a las tarifas y la responsabilidad de este gasto corresponde al gobierno federal tal y como lo señala la mencionada ley.

También es dolosa la utilización de la palabra “recibió”, como si fuera una cosa ajena a él, le recordamos a Felipe que la anterior administración era de su propio partido y de cuyo gabinete el mismo formó parte, nada mas ni nada menos, como Secretario de Energía. Es decir que él mismo se “heredó” un Organismo Público Descentralizado cuya Junta de Gobierno el mismo presidió, sin dejar de mencionar que también designo a Jorge Gutiérrez Vera como Director de LyFC. Digamos entonces que Calderón se “auto heredó” Luz y Fuerza del Centro.

Y como no decir que el estado que guarda la ,”empresa buena”  en sus manos es deplorable. CFE ha cerrado y reducido su capacidad de generación, para permitir la entrada de empresas privadas que ya general el 55 por ciento de la energía eléctrica. La energía producida por los generadores privados es más cara y las pérdidas son asumidas por CFE, además con los endeudamientos excesivos, los contratos leoninos y la corrupción, hacen que al cierre del segundo trimestre de 2012, presente pasivos totales por 849 mil 467 millones de pesos, lo que significó un crecimiento de 92 mil 699 millones o 12.24 por ciento con respecto a los pasivos por 756 mil 768 millones registrados a junio de 2011.

Tan “buena” es la empresa de “Calidad Mundial”, que sus escandalosos caso de corrupción son internacionalmente conocidos. Todavía suban los ecos de los millonarios fraudes cometidos por diversos funcionarios, principalmente de Néstor Félix Moreno Díaz. Este personaje participó en actos de corrupción desde hace por lo menos 12 años, lo que indica que el funcionario siempre contó con la protección de los gobiernos de Ernesto Zedillo y Vicente Fox. La PGR de  Felipe Calderón lo procesó solamente a raíz del escándalo detonado en Estados Unidos por los sobornos que recibió de la multinacional ABB a cambio de jugosos contratos de la paraestatal.

Resulta muy revelador que en su alocución Felipe Calderón no haya mencionado el amparo que nos ha otorgado el Segundo Tribunal Colegiado de Circuito en Materia de Trabajo, en contra de su inconstitucional decreto de “extinción” de Luz y Fuerza del Centro y su intento para exterminar al SME. Esa sentencia, que es inatacable y definitiva, obliga al Gobierno Federal a reinstalarnos en la empresa pública Comisión Federal de Electricidad (patrón sustituto), con nuestro Contrato Colectivo de Trabajo y nuestra organización sindical. Quizá se le paso.

Esta omisión y la falta de una resolución del Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para enmendar el laudo que daba por terminada la relación laboral de los trabajadores de Luz y Fuerza y negaba nuestro derecho al patrón sustituto, es señal de su arrogante desacato al Poder Judicial  y desprecio por el estado de derecho.

El costo político de un conflicto no resuelto y el millonario costo de salarios caídos, que se incrementan cada día por el incumplimiento de la sentencia del Poder Judicial  son una parte de la terrible herencia que Felipe Calderón deja a sus sucesor. Adicional y paradójicamente, hizo lo imposible, juntar en la Comisión Federal de Electricidad  a dos Contratos Colectivos de Trabajo y dos Sindicatos, uno malo por “charro” y una bueno por democrático.

FRATERNALMENTE
México D. F. 18 de octubre de 2012
“Por el derecho y la Justicia del Trabajador”

José Humberto Montes de Oca Luna
Secretario del Exterior
Sindicato Mexicano de Electricistas