lunes, 12 de diciembre de 2011

El modelo económico mostró ser una gran fábrica de pobres y desigualdad

Con Calderón aumentaron pobreza e indigencia: investigadores
Emir Olivares Alonso | Periódico La Jornada | Lunes 12 de diciembre de 2011, p. 16
En 25 años el actual modelo económico ha demostrado ser una gran fábrica de pobres y de desigualdad social, como revelan los informes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) divulgados hace unos días, señalaron especialistas universitarios.
Cristina Bayón e Isabel Rueda, de los institutos de investigaciones Sociales y Económicas de la UNAM, respectivamente, y Luis Lozano, del Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Economía, coincidieron que es grave que aún con esos indicadores internacionales (la Cepal indicó que sólo en México y Honduras había aumentado la pobreza, mientras la OCDE sostuvo que entre sus miembros México es la segunda nación más desigual), el gobierno continúe aferrándose a la línea del Consenso de Washington.

Para Bayón los impactos negativos del modelo neoliberal aplicado en los últimos años en el país marcan la imperiosa necesidad de cambiarlo, como se ha hecho en otras naciones de América Latina. Debemos voltear sobre todo al Cono Sur, apuntó. Señaló que en las últimas dos décadas el salario mínimo en el país ha caído 80 por ciento en términos reales.

La investigadora subrayó que en los últimos cinco años (lo que va del gobierno de Felipe Calderón) la pobreza y la indigencia han crecido, sobre todo en las áreas urbanas.

Estas carencias, dijo, no sólo se combaten con programas sociales, sino que se necesitan políticas de empleo, de recuperación del salario de los trabajadores, dinamizar en mercado interno y reorientar del papel del Estado en la protección social, estrategias que se han emprendido en varios países latinoamericanos.

Bayón remarcó que si bien la OCDE habla de una brecha de 26 veces entre los ingresos de las familias más ricas del país y la población más pobre, hay que sumar que 10 por ciento de los mexicanos con mayores ingresos concentra 34 por ciento de la riqueza, mientras 40 por ciento de los más pobres sólo tienen 16 por ciento de los ingresos nacionales.

Si a los ingresos se agrega el acceso a los servicios de educación y salud de calidad, la brecha de desigualdad en el país se dispara muchísimo más.

En tanto, con base en análisis del CAM, Lozano sostuvo que 64 por ciento de la población ocupada no tiene ingresos suficientes para alimentos. Añadió que los datos oficiales sobre pobreza son conservadores. El número de pobres que tenemos es de alrededor de 75 millones de mexicanos que enfrentan algún tipo de pobreza; en extremo estimamos no 11 millones (de acuerdo con números oficiales), sino 21 millones.