domingo, 9 de septiembre de 2018

Iniciativas y propuestas al nuevo gobierno

Martín Esparza Flores - Revista Siempre!
El movimiento sindical independiente y democrático del país, aglutinado en la Nueva Central de Trabajadores (NCT), analizó durante dos días los temas que deberán abordarse en la agenda del nuevo gobierno una vez que entre en funciones en diciembre próximo, relacionados con la energía, educación, el cooperativismo, cuestiones de género, así como la situación que enfrentan los trabajadores públicos, lo mismo que los jubilados y pensionados.
Durante la campaña del hoy presidente electo, se pugnó por impulsar un modelo laboral sustentado en el diálogo, que por añadidura implicará una apertura plural y abierta por parte de quienes desde el Congreso tendrán en sus manos la elaboración nuevas leyes que enmienden el contenido de reformas regresivas a los intereses y derechos de la clase trabajadora, como la laboral.
Los días 24 y 25 de agosto, se dieron cita en la sede del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), más de 70 sindicatos y 10 cooperativas, para participar en la Segunda Conferencia Nacional de la Nueva Central de Trabajadores, de donde surgieron acuerdos que, entre otros puntos, establecen una ruta parlamentaria para plantear a los nuevos legisladores iniciativas y propuestas que enfrenten con leyes más justas el problema del desempleo, la tercerización y demás factores adversos que han precarizado la fuerza laboral.
Dentro de las estrategias en el corto, mediano y largo plazo es prioritario y de suma importancia reagrupar el sindicalismo democrático para establecer una plataforma de lucha común a la solución de los principales problemas económicos y sociales que enfrenten los asalariados del campo y la ciudad.
En la agenda se incluyeron, entre otros puntos, la definición de las tácticas a seguir ante la nueva situación en la política nacional. Así como el diseño de alianzas que fortalezca el sindicalismo democrático, el cooperativismo y la economía solidaria.
Los diversos movimientos sociales que por más de 30 años dieron la lucha resistiendo los embates violentos y sistemáticos de los gobiernos neoliberales, fueron vitales para que la balanza se inclinara a favor de un cambio. Y por ello, están en su legítimo derecho a ser escuchados por el nuevo gobierno y los próximos legisladores federales, para que, a través de un análisis serio y profesional, se consensúen con los directamente interesados las agendas legislativas en materia laboral.
En el actual proceso de cambios por venir es inaplazable impulsar por todo el territorio nacional una campaña en pro de la libertad sindical que vaya de la mano con la lucha de los diversos movimientos sociales y de resistencia por la defensa de la tierra y los recursos naturales de infinidad de comunidades. El reto es avanzar en la transformación social de México más allá de las elecciones.
El paso a seguir es lograr que los acuerdos alcanzados en el encuentro sindical de agosto pasado sean escuchados por quienes tendrán en sus manos el futuro del país en los próximos seis años, y quiénes desde el Congreso podrán echar reversa a reformas laborales que han sido lesivas al interés de millones de trabajadores. El diálogo debe ser el principal baluarte para ir construyendo acuerdos que combatan la precariedad, fortalezcan el mercado y rompan la cadena de atropellos cometidos al amparo de las reformas laborales impulsadas por los últimos dos presidentes. La NCT está lista a plantear sus propuestas para mejorar el nivel de vida de la clase trabajadora en su conjunto.