lunes, 25 de enero de 2016

Empresas del priismo, las favorecidas en el Nuevo Aeropuerto

El Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos del gobierno de Enrique Peña Nieto, implica una inversión de miles de millones de dólares. Por lo pronto, en las licitaciones para las obras preliminares se les asignaron contratos a empresas y consorcios relacionados por negocios o lazos familiares con el priismo mexiquense. Y todavía falta lo mejor del botín…
24 enero 2016 | Arturo Rodríguez García | Proceso
MÉXICO, DF (Apro).- Entre los ganadores de las primeras tres licitaciones destaca Transportaciones y Construcciones Tamaulipecos (Tracotamsa), propiedad de Rolando Cantú Barragán, un contratista que hasta hace poco sólo operaba en Tamaulipas y es primo de Juan Armando Hinojosa Cantú, el dueño de Grupo Higa, quien construyó y financió las residencias de la primera dama, Angélica Rivera, y del secretario de Hacienda, Luis Videgaray.

Desde noviembre de 2014, este semanario publicó que Tracotamsa pasaba por una fase de prosperidad (Proceso 1985). Pero fue hasta el pasado 16 de diciembre cuando salió de Tamaulipas y el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) le asignó la construcción de caminos provisionales del NAICM por más de 608 millones de pesos.

Tracotamsa concursó y ganó la licitación en consorcio con Inmobiliarios Mexicanos, de la cual no se encontraron antecedentes de proveeduría gubernamental, sólo de oferta de vivienda en Reynosa, donde radica su dueño y de donde también es originario Hinojosa. El columnista de Milenio Tampico Eduardo Javier González publicó el 21 de diciembre que Inmobiliarios Mexicanos pertenece a Cantú Barragán.

ANUNCIAN FALLO

El mismo 16 de diciembre, el GACM anunció el fallo de la segunda licitación, en la que ganó el consorcio formado por Omega Construcciones Industriales, Calzada Construcciones (Calco) y Construcciones y Dragados del Sureste (Cydssa). Las dos últimas están asociadas de manera permanente en la razón social Hidrovías y Carreteras (Hycsa).

Calco es propiedad de Alejandro Calzada Prats, hijo del priísta tabasqueño Feliciano Calzada Padrón, que fue secretario particular de Roberto Madrazo Pintado y colaborador en sus aventuras presidenciales de 2000 y 2006 (Proceso 1245 y 1999). Hycsa señala en su sitio de internet que para operar concesiones carreteras está asociada con La Peninsular. Esta constructora es subsidiaria de Grupo Hermes, el corporativo de Carlos Hank Rohn, hijo de Hank González.

Omega Construcciones Industriales es parte del Grupo Omega, un conjunto de empresas con numerosos contratos con el Gobierno del Distrito Federal para obras como la remodelación del Autódromo Hermanos Rodríguez y la Línea 6 del Metrobús. Se especializa en construcción de infraestructura, además de ser concesionaria de carreteras y franquicias gasolineras.

Omega, propiedad de Jorge Miguel Melgarejo Hadad, forma parte del consorcio que construirá la tercera etapa del tren interurbano México-Toluca, otra obra emblemática para la administración peñanietista y cuyos principales constructores son cercanos a la élite política mexiquense y a las empresas relacionadas con ella.

EXPANSIONES SEXENALES

Tracotamsa, la empresa de Cantú Barragán, opera desde 2002 como contratista de obra pública federal. Se especializa en caminos y carreteras, pero sólo tiene antecedentes como proveedora gubernamental en Tamaulipas.

Entre 2002 y 2012, obtuvo 17 contratos, principalmente de la delegación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en Tamaulipas y de Pemex Exploración y Producción. En esos contratos sumó mil 627 millones de pesos por realizar obras en carreteras, caminos de terracería y reparación de tramos.

A partir de que Peña Nieto asumió la Presidencia, las operaciones del primo de Juan Armando Hinojosa Cantú se expandieron: salió de Tamaulipas para realizar al menos una obra portuaria en Campeche y, ahora, incursionar en el NAICM.

En el primer trienio del gobierno de Peña Nieto, Cantú Barragán ha obtenido 17 contratos, los mismos que consiguió en la década precedente, pero obtuvo casi el doble de ingresos, pues entre 2013 y 2015 acumula ya 2 mil 890 millones de pesos.

Estos cálculos provienen de consultas en el Portal de Obligaciones de Transparencia, donde debe colocarse toda la información sobre los contratos gubernamentales, y de la base de datos Compranet, donde se registra a los proveedores. Pero en dichas plataformas no se transparenta todo. Por ejemplo, no se encontró ahí registro del contrato para la construcción del puerto de Matamoros, asignada por la SCT a Tracotamsa en 2013 por mil 400 millones de pesos, aunque el proyecto fue ampliamente difundido por funcionarios y dependencias federales en Tamaulipas.

MISMA SITUACIÓN

En la misma situación se encuentran las firmas tabasqueñas Calco y Cydssa, que integran el Grupo Hycsa y están asociadas con la constructora de Hank Rohn.

El 29 de septiembre de 2015, el GACM —la semiparaestatal a la que el gobierno de Peña Nieto concesionó el proyecto— publicó la primera convocatoria de licitación de los 21 paquetes de contratos para la construcción del NAICM.

De entre 32 propuestas realizadas por 80 empresas, el 11 de diciembre el GACM declaró a Coconal ganadora del contrato por mil 762 millones de pesos para la nivelación y limpieza de terreno. Cinco días después se emitieron los otros dos fallos.

El contrato de caminos provisionales, por el cual concursaron 97 empresas y una persona física que ofrecieron 47 propuestas, fue asignado a Tracotamsa. El fallo para el contrato de carga, acarreo y desazolve —al que aspiraban 69 empresas que presentaron 37 propuestas— se le otorgó al consorcio formado por Omega, Calco y Cydssa.

El resultado general es que, en las licitaciones para las obras preliminares a la construcción del NAICM, participaron 224 empresas y 116 proyectos, de los cuales el GACM se inclinó precisamente por las relacionadas con el priísmo del Estado de México.