sábado, 8 de agosto de 2015

Mal augurio… El Toque Crítico de Martín Esparza

Apremio de un nuevo rumbo 
La noticia por sí sola ha concitado a la reflexión nacional: en el México de las grandes reformas estructurales hay 2 millones más de pobres a consecuencia directa de una economía que se encuentra paralizada y sin posibilidad alguna de cubrir las magnificadas expectativas entorno a la creación de miles empleos, entre otros muchos pendientes.  El rumbo económico va en reversa y es hora de que los diversos sectores sociales y productivos emprendan un gran análisis y debate nacionales, al margen de los partidos políticos, para demostrar a la actual administración y a sus ideólogos neoliberales que tras 30 años de seguir ciegamente la teoría de la globalización y el libre mercado, el país se encamina a una ruina total. Y no hay de otra; es hora de cambiar de ruta y modelo.
1 agosto 2015 | Martín Esparza Flores | Siempre!

Los datos de organismos autónomos como el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) son categóricos cuando señalan que lejos de abatirse en rezago social este va en aumento mientras en 2012 había en el país 53.3 millones de personas en situación de pobreza, en 2014 la cifra llegó al 55.3 millones. Es decir que uno de cada dos mexicanos encuentren en los linderos del hambre y la marginación social. La caída en los precios internacionales del petróleo y el deslizamiento paulatino del peso frente al dólar, iniciado de septiembre del pasado año, puso de nuevo en evidencia la fragilidad de nuestra economía interna y su menguado aparato productivo que tras 30 años de una desventajosa relación comercial impuesta por el Tratado de Libre Comercio, ha convertido a México en eterno rehén de las importaciones para cubrir su abasto en rubros básicos como la alimentación y los medicamentos, ahora elevados en el precio final de sus productos al consumidor por el alza del dólar. 

En septiembre pasado, el ejecutivo anunció el segundo informe de gobierno que tras la aprobación de la reforma energética se detonarían en el país millonarias inversiones y la creación de miles de empleos. De acuerdo con las estimaciones oficiales, para 2018 se alcanzaría la meta de generar 500.000 puestos de trabajo bien remunerados. 

Ahora, a casi un año de distancia el panorama desalentador: de los 19 bloques licitados en la Ronda Uno, apenas dos fueron adjudicados, en contraparte al ostentoso anuncio hecho por el titular de la Secretaría de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, en marzo pasado, cuando estimo que tras el proceso de licitación se detonaría la creación de 212.000 empleos -contemplados en el periodo 2015-2018-, a la par de generarse inversiones por 69 mil 500 millones de dólares. Con lo alcanzado en la Ronda Uno, el país apenas si obtendrá ingresos anuales por 21 millones de pesos. 

Y ni que mencionar sobre lo expresado por el Subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, Miguel Messmacher, en el sentido de que en la participación de la renta petrolera por venir, las empresas privadas, nacionales y extranjeras sólo entregarán el país un diez por ciento de sus ganancias. Mal augurio de lo que le espera a nuestra quebrantada economía.

Fuente: Revista Siempre!