jueves, 27 de junio de 2013

El Congreso brasileño cede a demandas populares

Congreso de Brasil castiga corrupción y da más recursos para salud y educación
No obstante de una reacción favorable del Poder Legislativo a las protestas, unas 40 mil personas participaron el miércoles en una manifestación realizada en Belo Horizonte
27 junio 2013 | Redacción Aristegui Noticias
En respuesta a las manifestaciones que han cimbrado todo Brasil en las últimas semanas, el Senado Federal de este país aprobó un Proyecto de Ley que convierte a la corrupción en delito grave.
Esta iniciativa fue presentada en 2011, la cual establece que los delitos de peculado, corrupción activa y pasiva sean castigados de manera enérgica por la ley.

Por ello, todos aquellos que incurran en esta falta pueden recibir penas de cárcel de cuatro a doce años, cuando por la misma falta era solo de dos a doce. Asimismo, ahora los acusados no podrán salir bajo fianza.

El castigo por ser culpable de corrupción pasiva, que consiste en solicitar o recibir beneficios indebidos, aumenta a una pena de prisión de cuatro a doce años, además de una multa.

En lo que se refiere a la corrupción activa, que radica en ofrecer beneficios indebidos a los funcionarios públicos, a fin de llevarlo a la práctica, también pasa a ser de prisión de cuatro a doce años y una multa.

Para el uso indebido de funciones, que consiste en la exigencia de un pago indebido hacia su persona que no está contemplado por la ley, aumenta el castigo de cuatro a ocho años y una multa.

El pasado lunes, la presidenta Dilma Rousseff anunció “Cinco Pactos” para mejorar los servicios en las áreas social, económica y política en Brasil y entre ellos destacaba la necesidad de “luchar contra la corrupción en una forma más enérgica y convertirlo en un delito grave”.

Más recursos para salud y educación… y más protestas

La Cámara baja del Congreso votó a favor de un proyecto de ley que destina 75 por ciento de las regalías de la producción futura de petróleo a programas de educación, y el restante 25 a salud.

No obstante a la reacción del Congreso, miles de personas salieron de nueva cuenta a las calles de las principales ciudades brasileñas, el miércoles, para protestar contra el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, informaron las ediciones digitales de los principales medios.

La estatal Agencia Brasil indicó que unas 40 mil personas participaron en una manifestación realizada en Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais, donde este miércoles jugaron las selecciones de Brasil y Uruguay por la Copa Confederaciones.

La convocatoria a la manifestación se realizó mediante las redes sociales para protestar por la alta suma invertida por Brasil en la organización del torneo de futbol internacional, además de pedir una lucha más férrea contra la corrupción y mayor transparencia.

Tras la manifestación, se reportaron saqueos, dos incendios de “proporciones incontrolables” en dos concesionarias de automóviles y disturbios en tiendas, lo que dejó un saldo de un muerto y al menos 25 personas detenidas.

Así se vivieron las manifestaciones en Belo Horizonte

(Youtube – NTN24)

(Con información de Notimex y O’Globo)