viernes, 22 de octubre de 2010

La Jornada: Astillero

El Sindicato Mexicano de Electricistas, sin embargo, sí fue alcanzado por la mano dura, tan ansiosa como está de meter orden y aplicar castigos ejemplares. El país tomado por delincuentes impunes, pero fuerzas federales se aplican en táctica y número a detener en Puebla a Miguel Márquez, un integrante de la directiva de la organización en resistencia, luego de un mitin. José Antonio Almazán y Cecilia Figueroa explicaron a esta columna:Pesan sobre Márquez acusaciones de privación ilegal de la libertad agravada contra el consumo y la riqueza nacionales, resistencia de particulares y daño en propiedad ajena que, como es sabido, son las acusaciones con las que hoy el gobierno de Calderón criminaliza las luchas sociales. No debería extrañarnos. Sobre el SME pesan cientos de averiguaciones previas, con las que el gobierno ha buscado contener y desarticular un año de resistencia en contra de la privatización en curso de la industria eléctrica en el centro del país y la entrega regalada de la fibra óptica de Luz y Fuerza del Centro a las grandes empresas trasnacionales.