lunes, 17 de febrero de 2014

Rechazo frontal a la mega minería en Baja California Sur

Los argumentos de las empresas extractivas no convencen a la sociedad civil, que levantó un movimiento de resistencia para blindar sus riquezas naturales contra las manos de las mineras.
17 febrero 2014 | Medio ambiente y sociedad | Desinformémonos
México. La mega minería posó sus ojos en el norteño estado de Baja California Sur donde, a pesar de las campañas para que la población apruebe diversos proyectos extractivos, se levantó una fuerte oposición ciudadana.
Baja California Sur es un estado paradisiaco, con bellezas naturales únicas; sin embargo, se encuentra amenazado por las compañías mineras trasnacionales que pusieron su mira en una de las zonas más importantes del sur: la reserva de la biósfera “Sierra La Laguna” y sus alrededores, donde pretenden instalar varios mega proyectos de minería tóxica. En esta sierra se encuentra el único bosque de pino-encino del estado, así como una gran diversidad de especies de flora y fauna, incluidas especies endémicas, amenazadas y en peligro de extinción.

A la amenaza contra los ecosistemas se suma la riqueza más importante de la Sierra La Laguna: el agua, que abastece las necesidades de casi el 80 por ciento de los habitantes de Baja California Sur, pues mientras que en el resto de los municipios de La Paz y Los Cabos se reciben de 10 a 15 centímetros anuales, en la Sierra se registra hasta más de un metro de lluvia. Por ello, la Sierra La Laguna es de importancia vital para la existencia de Baja California Sur. Por todas estas razones, el 6 de junio de 1994 la Sierra La Laguna se decretó como área natural protegida con el carácter de reserva de la biósfera, ubicada en los municipios de La Paz y Los Cabos, en Baja California Sur.

No obstante, el 22 de mayo de 1997, la Secretaría del Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (SEMARNAP, hoy SEMARNAT), haciendo caso omiso del decreto -que, en otras condicionantes, establece que queda prohibido verter o descargar contaminantes en el suelo, subsuelo y en cualquier clase de corriente o depósitos de agua y desarrollar actividades contaminantes-, a escondidas y de manera ilegal emitió autorización en materia de impacto ambiental a favor de la empresa Paredones Amarillos, propiedad de la canadiense Vista Gold.

La minera pretende llevar a cabo el mega proyecto a cielo abierto denominado “Paredones Amarillos”, ubicado dentro del área natural protegida Sierra La Laguna, para extraer un total de 202 millones de toneladas de mineral, con un promedio de 80 mil toneladas diarias de las cuales 11 mil toneladas serán molidas y lixiviadas con cianuro, y las 69 mil restantes serán desechadas a un costado de la mega excavación, por ser pobres en oro (pero se les “olvida” mencionar que son ricas en arsénico y metales pesados).

A partir de la fecha del permiso, se emitieron una serie de extensiones, prórrogas y permisos igualmente ilegales y en secreto. Debido a la baja en el precio del oro no les fue rentable iniciar la explotación y postergaron los trabajos, con el consentimiento y el total silencio de todos los implicados.

La sociedad reacciona y las mineras contraatacan

En el año 2009, al enterarse de ese mega proyecto, la sociedad no contaba con información completa sobre el tema, por lo que se integró la asociación Medio Ambiente y Sociedad, con el objetivo de informar, educar y sensibilizar, con datos oficiales y fundamentos técnico-científicos que pudieran mostrar y transmitir a través de imágenes y cifras el grave impacto ambiental, social y económico que representarán éste y otros megaproyectos de minería tóxica. Comenzó un cambio radical en la percepción de la sociedad con respecto al proyecto minero, y se propiciaron manifestaciones antimineras por partes de distintos sindicatos, asociaciones y clubes.

Ante la creciente oposición de la población, la empresa minera trató de “limpiar su imagen”, organizando una asociación civil con personas de la zona a favor de la minería, y cambió el nombre del proyecto a “Concordia”.

Sin embargo, el movimiento de resistencia continuó. Se impartieron conferencias, se repartió material informativos y se dieron entrevistas a los medios de comunicación. Se organizaron talleres, foros, festivales, tianguis de productores regionales en colonias populares y un proyecto gráfico de “Muros Contra Minas”, al que se sumaron artistas y voluntarias.

En enero del 2011, la coalición de grupos contra la minera convocó a la población para formar un llamado de auxilio en una playa de Los Cabos, al que asistieron más de 2 mil personas –en un estado que apenas supera los 600 mil habitantes. Posteriormente se realizó una marcha de Los Cabos a la ciudad de La Paz; y en el periodo de elecciones, los cuatro candidatos a gobernador se vieron obligados a firmar una carta-compromiso de rechazo total a estos proyectos en Baja California Sur. Además, en un encuentro técnico-científico entre Medio Ambiente y Sociedad y los expertos de Vista Gold, se evidenciaron las fallas en los estudios de la empresa y su imposibilidad para probar los argumentos con los que se ofertaban como empresa sustentable.

En las comunidades rurales se constituyó la Asociación Civil “En Defensa Del Medio Ambiente y Desarrollo Rural Sustentable”, con habitantes de todas las poblaciones de la delegación de San Juan de los Planes quienes están directamente amenazados por los proyectos: “San Antonio”, de Minera La Pitalla, propiedad de Argonaut Gold; “Picacho Blanco”, de Minera Cacachilas y La Cieneguita, al parecer, propiedad de un inversionista extranjero ligado a Wal Mart.

En diciembre de 2011, la minera “La Pitalla” (Argonaut Gold) presentó su manifestación de impacto ambiental para el megaproyecto “San Antonio”. Se reunieron casi 7 mil firmas para exigir una reunión pública, a la que SEMARNAT convocó en febrero de 2012. La reunión tuvo una asistencia récord, pues más de mil personas llegaron hasta la distante sede y se presentaron varias decenas de ponencias, la mayoría en contra de la mina. Al final, la farsa de quienes representan a la empresa hartó a la ciudadanía y el grito de “¡Fuera! ¡Fuera!, los directivos de la minera salieran por la puerta trasera.

En un nuevo intento, Vista Gold se asoció con Invector Group, empresa supuestamente nacional pero con presidente canadiense, y rebautizaron el proyecto “Paredones Amarillos-Concordia” como “Los Cardones”. Iniciaron una agresiva campaña publicitaria con información engañosa, tratando de convencer a la población; pero ésta no cayó en la trampa.

En la consulta pública efectuada en octubre de 2012, a pesar del dinero que invirtieron, los empresarios mineros reunieron pocas personas y tuvieron que llevar en su apoyo a niños de primaria y secundaria de las antiguas poblaciones mineras (El Triunfo, San Antonio); aun así, continuaron siendo minoría. Quienes presentaron el proyecto de la minera fueron desmentidos por especialistas y cuestionados razonadamente por la población asistente, que, finalmente, los reprobó y los hizo huir.

En el más reciente intento, Vista Gold le vendió todas sus acciones a Invecture Group, en la que, se dice, Ricardo Salinas Pliego (dueño de TV Azteca, Elektra, etcétera) es el principal accionista. Presentaron otra manifestación de impacto ambiental en octubre de 2013. Sospechosamente, la SEMARNAT fijó la fecha de la reunión pública para el día 9 de enero del 2014, quizás pensando que por ser época de vacaciones estudiantiles asistiría poca gente; pero se equivocaron, pues el lugar se llenó, aunque en parte con gente acarreada a quienes las mineras les dieron 150 pesos más y la comida.

Las ponencias contra el megaproyecto minero fueron muchas y muy bien documentadas, técnica y científicamente, a diferencia de las ponencias promovidas por la empresa. Una buena parte de la gente que la minera llevó, conforme escuchó sobre los impactos negativos en el medio ambiente y en la salud de toda la población, se cambió de bando y terminó apoyando la oposición a la mega minería tóxica. Ante la amenaza de la SEMARNAT de dar por terminada la reunión pública debido al fuerte vocerío en contra de quienes argumentaban a favor de la mina, los asistentes se pusieron de pie y dieron la espalda a quienes argumentaban a favor de la actividad extractiva. Al final, la población asistente se levantó y abucheó a las representantes de la minera y el gobierno, e hizo que salieran corriendo despavoridas.

Desde hace dos años, Medio Ambiente y Sociedad solicitó al municipio que se retomara el proceso de revisión y modificación para la aprobación del POEL (Programa de Ordenamiento Ecológico Local), el cual define el uso del suelo municipal, y de estar vigente le impediría establecerse a las mineras aunque obtuviesen los permisos federales. El municipio le dio largas al asunto y ante ello, se presionó a través de las redes y manifestaciones directas a la presidencia municipal.

Uno de los argumentos del municipio para no hacer el reordenamiento es que no tenía recursos para pagar a especialistas, así que se reunieron casi 50 especialistas dispuestos a trabajar sin cobrar. El municipio ya no tuvo argumentos y ahora se trabaja en el POEL con el objetivo de contar con un instrumento legal que blinde al municipio de la mega minería tóxica.


En los primeros días de enero se registraron intentos de intimidación contra integrantes de Medio Ambiente y Sociedad, por lo que se responsabiliza al gobierno del estado y a los dueños de las minas: Desarrollo Zapal, Vista Gold, Argonaut Gold, Invecture Group, etcétera, de cualquier atentado contra la integridad de los miembros de esta asociación y de sus familias, Las autoridades estatales enviaron agentes judiciales el pasado 8 de enero a vigilarnos e intentar intimidar a esta misma asociación, casualmente, un día antes de que se efectuara la reunión pública al mega proyecto de minería tóxica “Los Cardones”.

La sociedad y las organizaciones están conscientes de que se trata de una lucha a largo plazo, en la que será de gran importancia la información hacia las jóvenes generaciones. Mientras las leyes sean totalmente favorables a estos proyectos y violatorias de los derechos constitucionales, no se deberá bajar la guardia.

Fuente: Desinformémonos.org