La social democracia escandinava había impulsado la jornada de siete horas para el trabajo, y en Suecia ya era una realidad, con mucho éxito en cuanto a la productividad. Pero desde abril pasado, empezaron las
pruebascon sectores o centros de trabajo, de la jornada de seis horas. El municipio de Gotenburgo empezó por sus propios empleados. El argumento principal ha sido el aumento de la productividad. El presidente municipal, del
Partido de Izquierda, así se llama, dijo que una fábrica de coches de ese municipio probó con su personal la jornada de seis horas y que
el resultado fue formidable.