Gordillo, SNTE y PGR, inmiscuidos en juicio por valiosas obras de arte
En disputa, 15 cajas con pinturas y seis murales seccionados de Diego
Rivera
El tesoro cultural fue adquirido por la maestra para exhibirlo en la
frustrada Ciudad de la Innovación
Alfredo Méndez | Periódico La Jornada | Lunes 12 de mayo de 2014, p. 3
Alfredo Méndez | Periódico La Jornada | Lunes 12 de mayo de 2014, p. 3
Al menos 15 cajas que contienen obras artísticas de pintores
afamados, entre ellas seis murales seccionados que Diego Rivera pintó en Nueva
York, forman parte de un juicio civil en el que están inmiscuidos los actuales
dirigentes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), la
Procuraduría General de la República (PGR) y la maestra Elba Esther Gordillo
Morales.
Los cuadros y murales fueron adquiridos por Gordillo cuando estaba al frente del sindicato magisterial. Su valor supera los 30 millones de dólares, de acuerdo con estimaciones hechas por fuentes del SNTE y por funcionarios del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), quienes confirmaron a La Jornada la existencia del litigio.
La maestra compró las obras artísticas con dinero del sindicato, con el propósito de que formaran parte del acervo de un museo que iba a construir el SNTE en honor a Diego Rivera, en un terreno de 40 mil metros cuadrados ubicado en la zona de Cuajimalpa.
‘‘Para regocijo de los mexicanos’’
El 21 de octubre de 2012, Gordillo Morales anunció la edificación de la llamada Ciudad de la Innovación, que incluiría una universidad, un teatro, un museo, ‘‘toneladas’’ de libros, pinturas y los seis murales de Diego Rivera.
El arquitecto responsable del proyecto, Enrique Norten, declaró ese día que Gordillo había comprado las obras de arte ‘‘para regocijo de los mexicanos’’.
La edificación de la Ciudad de la Innovación fue avalada a mano alzada por los delegados al sexto Congreso Nacional Extraordinario del SNTE, después de que Norten presentó el proyecto.
‘‘La gran sorpresa y el gran regalo que de alguna manera nos hace la maestra
(Gordillo) a todos nosotros y al país, es que ha recuperado esos seis murales
(de Rivera) y los ha traído a México. Los murales están totalmente restaurados y
están ahora almacenados junto con toda la demás obra de arte, que es muchísima,
y que forma parte de esta colección’’, destacó el arquitecto en declaraciones a
los medios de comunicación, que nunca fueron desmentidas. Norten recordó, en
octubre de 2012, que los murales de Rivera fueron vetados en Estados Unidos.
Según el arquitecto, Diego Rivera inició en 1933 un mural para el Rockefeller Center, pero su dueño, el empresario John D. Rockefeller, decidió suspender la obra porque el pintor mexicano incluyó ‘‘referencias comunistas’’. Un año después, el muralista mexicano recuperó las ideas de esta pintura en el mural El hombre en el cruce de caminos, que hizo para el Palacio de Bellas Artes de la ciudad de México.
La construcción de la Ciudad de la Innovación se frustró por la detención de Elba Esther Gordillo, el 26 de febrero de 2013. Hoy las obras se encuentran resguardadas por autoridades federales en un almacén cuya ubicación se desconoce públicamente.
El pasado 18 de marzo, los abogados de la maestra pusieron las cajas con las pinturas y murales (seccionados) a disposición de la juez civil Flor de María Hernández Mijangos (el procedimiento legal se conoce como consignación de bienes mediante jurisdicción voluntaria), debido a que los dirigentes del SNTE no quisieron hacerse cargo de su resguardo.
Elba Esther Gordillo en Tlalnepantla,
el 6 de febrero de 2013, 20 días antes
de su detención. Foto: Yazmín Ortega
Cortés
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‘‘Se tiene por admitida, por vía de jurisdicción voluntaria, la consignación
de bienes consistentes en 15 cajas de cartón, debidamente selladas, cuyo
contenido, según asienta la parte promovente, son obras de arte, bocetos de
proyección artística y los originales que fueron elaborados por (el muralista
Diego) Rivera, así como cuadros que ahora quedan consignados con registro
notarial respectivo’’, dice el expediente judicial 227/2014.
Entre agosto de 2013 y enero de 2014, según consta en el mismo expediente del
juzgado cuarto de lo civil en el Distrito Federal, a cargo de Hernández
Mijangos, los abogados de Gordillo Morales contactaron a los dirigentes del
SNTE.
Los abogados defensores de la maestra pactaron con la profesora Soralla
Bañuelos de la Torre, coordinadora del Colegiado Nacional de Asuntos Jurídicos
del SNTE, efectuar el 14 de febrero de 2014 la entrega de las 15 cajas.
‘‘Para tales efectos, y a petición de la profesora Soralla Bañuelos, se
acordó el 14 de febrero del 2014 llevar a cabo la apertura de las cajas ante un
perito en arte del Conaculta (Consejo Nacional para la Cultura y las Artes), así
como ante un notario público, con la finalidad de que diera fe de la entrega de
dichas cajas y de su contenido’’, refiere el escrito de consignación que
elaboraron los abogados de Gordillo y que consta en el juzgado cuarto de lo
civil.
Posible nueva acusación
‘‘En este orden de ideas, y al haber cancelado la profesora Soralla Bañuelos la apertura y entrega de las cajas, programada el 14 de febrero de 2014, se optó por presentar ante el juzgado competente en materia civil del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal la jurisdicción voluntaria de consignación de las 15 cajas en favor del SNTE, y que por turno recayó en el juzgado cuarto civil’’ capitalino, refiere el expediente.
La PGR emitió en abril pasado su propia medida cautelar de
aseguramiento de las obras artísticas que adquirió Gordillo, por formar
parte de una averiguación previa con la que se busca acreditar a la maestra una
nueva acusación por lavado de dinero.
No obstante, como la juez Hernández Mijangos dictó un mes antes la admisión de consignación de esos bienes, la autoridad ministerial no ha podido tener bajo su cuidado las cajas con las pinturas, cuya ubicación actual sólo la conocen autoridades judiciales, la maestra Gordillo, sus abogados y la PGR.
La Jornada buscó a los líderes del sindicato magisterial para conocer su postura sobre esta información, pero rechazaron dar su versión de los hechos.
Fuente: La Jornada