Sólo 2 de cada 10 personas mayores de 60 años tienen esa prestación, señala un estudio
La pensión actual de un trabajador mexicano que recibía 3 minisalarios es de sólo 67 pesos diarios
El sistema de pensiones en México tiene un presente y un futuro “poco halagüeño”. Actualmente, sólo dos de cada 10 personas mayores de 60 años disfruta de alguna pensión, mientras que seis de cada 10 trabajadores no cotiza a ningún sistema de retiro y, por lo tanto, no está acumulando recursos para cuando pase a la edad de jubilación, de acuerdo con un estudio de BBVA Research.
La reforma al sistema de pensiones en México, iniciada en 1997, ha contribuido a elevar los recursos financieros disponibles en el mercado local, invertidos tanto en bonos del gobierno como usados para financiar a empresas. Sin embargo, en términos de cobertura y pensión que ofrecerá a los afiliados hay un futuro “poco halagüeño”, según el estudio del área de análisis del Grupo BBVA, controlador de BBVA Bancomer.
Con los actuales niveles de aportación al sistema de Afore, un trabajador que gana el salario mínimo tendrá, al momento del retiro, una pensión equivalente a 55 por ciento de su último salario. Si ganan el equivalente a tres salarios mínimos –202 pesos diarios– su pensión será de un tercio del sueldo –67 pesos en este caso– que devengaba al llegar al retiro. Y para quienes perciben más de 15 salarios mínimos –mil 10 pesos al día– el monto de su pensión será equivalente a 29 por ciento de su sueldo, según datos de la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore).
Hasta antes de 1997, los trabajadores en activo financiaban con sus aportaciones las pensiones de los trabajadores en retiro. Desde entonces, ahora incluso para los empleados del sector público federal, cada trabajador aporta a una cuenta individual, de la cual deberá financiar su pensión. Quienes comenzaron a laborar antes de julio de 1997 se pueden jubilar con la anterior ley.
La reforma del sistema de pensiones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) efectuada en 1997 permitió acotar el creciente costo fiscal que significaba el anterior esquema de reparto. A 16 años de su creación, el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) ha tenido efectos macroeconómicos favorables para México, ya que ha incrementado significativamente el ahorro financiero y fomentado el desarrollo de los mercados financieros locales, señala el estudio de BBVA Research.
“Sin embargo, la cobertura del sistema de pensiones no ha evolucionado como se esperaba debido a la alta tasa de informalidad en el mercado de trabajo. Además, las tasas de reemplazo proyectadas de las pensiones por vejez en el sistema de contribución definida serán bajas, debido a problemas exógenos al sistema de pensiones, como las bajas tasas de aportación y bajas densidades de cotización”, asegura el estudio.
La aportación al fondo de retiro es de 6.5 por ciento del salario. El estudio plantea la conveniencia de elevarla a 10 por ciento, que es la prevaleciente en países con una esperanza de vida similar a la de México.
A 16 años de su creación, el SAR administra 2 billones de pesos, equivalente a 12.7 por ciento del producto interno bruto (PIB); que constituyen los ahorros para la jubilación reunidos en 49.8 millones de cuentas individuales. Sin embargo, los niveles de cobertura distan de ser los óptimos, y la mayor parte de la fuerza laboral queda sin ninguna protección en la vejez, agrega.
El escenario para el sistema de pensiones en México es “poco halagüeño y lo seguirá siendo a largo plazo”, considera. “La posibilidad de obtener pensiones adecuadas quedará restringido a aquellos que tengan condiciones socioeconómicas con un historial laboral prolongado y que, por consiguiente, puedan hacer aportes regularmente a sus cuentas individuales”. En el país, recuerda el estudio, 60 por ciento, seis de cada 10, personas en edad de trabajar se desempeña en actividades informales y, por tanto, no cotiza a ningún sistema pensionario.
Fuente: La Jornada
Fuente: La Jornada