Wall Street cierra 2013 como uno de los mejores años en más de una década y media
Westminster, California, 28 de diciembre.- Este sábado se cumplió el plazo para más de un millón 300 mil estadunidenses sin trabajo, quienes desde este día se quedaron sin subsidio federal por desempleo. Muchas personas sin trabajo se verán forzados a vender sus autos, mudarse y aceptar empleos con salario mínimo luego de haber recortado ya sus gastos hogareños y empeñado pertenencias para poder sostenerse. La Casa Blanca apremió a los legisladores republicanos a que apoyen una iniciativa de ley para extender la vigencia de la ley del seguro de desempleo de largo plazo.
Gene Sperling, director del Consejo Nacional Económico de la Casa Blanca, afirmó que la inacción en el Capitolio sobre esta medida desafía el sentido común y recordó que nunca antes el gobierno había cortado este seguro de desempleo, cuando la economía registra altos índices de desocupación. “Esto significaría un revés para estas familias y nuestra economía”, advirtió Sperling al referirse al eventual recorte. Los beneficiados hasta ahora con esos fondos han permanecido sin un puesto de trabajo durante 26 o más semanas.
Mientras el mejor año de Wall Street en más de una década y media se acerca a su fin, pocos esperan que el sólido desempeño se repita en 2014, aunque los operadores tienen muchas razones para sentirse optimistas.
Si bien el mercado probablemente llegue a enero de manera tranquila, con muchos operadores todavía fuera por los festivos navideños y pocos catalizadores de importancia en escena, la tendencia alcista continuaría la semana próxima, especialmente para algunos de los nombres que brillaron en 2013.
El crecimiento económico se aceleraría el año próximo, impulsando el empleo y el poder de compra de los consumidores. Pero con los mercados estableciendo máximos históricos una y otra vez, eso podría no traducirse en ganancias como ocurrió de manera espectacular en 2013.
“Hay una sensación dominante de que la economía está mejorando, y la Fed sigue estando del lado del mercado tras decir que mantendrá las tasas bajas”, sostuvo Donald Selkin, estratega jefe de National Securities en Nueva York. “Sin embargo, hay pocas posibilidades de otra subida de 30 por ciento o algo semejante el año próximo”, agregó el analista.
Greg y Barbara Chastain, de Huntington Beach, California, pusieron a sus hijos en el programa de almuerzos escolares y eliminaron las cenas fuera de casa, tras perder su compañía de fabricación de camisetas en junio por una disputa con un inversionista. Los Chastain agotaron sus prestaciones estatales por desempleo y ahora que los pagos federales se acabaron, a menos que encuentren empleos pronto, la pareja planea sacar a sus hijos de la escuela secundaria en enero y mudarse unos 80 kilómetros (50 millas) al este, donde un familiar tiene una casa en la que podrían vivir y ahorrar el alquiler.
“Pudiéramos deshacernos de uno de los autos, pero entonces no puedes ir al trabajo. Es un ciclo sin fin”, expuso Greg Chastain, de 43 años, mientras acompañaba a su esposa a un centro del condado de Orange de apoyo a desempleados. Dijo que al final podrían probar fortuna en un estado menos caro, como Arizona o Texas, si él puede conseguir un empleo en la industria manufacturera allí.
El fin del programa de cinco años –que extendió los pagos para las personas que han estado desempleadas por largo tiempo– afectó desde este sábado a 1.3 millones de estadunidenses y afectará a centenares de miles más en los meses siguientes. Bajo el programa, el gobierno federal pagó un estipendio mensual promedio de mil 166 dólares.
Fuente: La Jornada
Fuente: La Jornada