A navaja limpia la disputa por el PAN
Álvaro Delgado - Proceso
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Nunca negaron ser ladrones, pero se decían
“responsables” en economía. Fue otra inmensa mentira. Enrique Peña Nieto
y sus tripulantes han demostrado no sólo descarada corrupción, sino
inaudita insensatez. El resultado: Una economía débil, en vías de
colapsar.
Hace tres meses huyó Luis Videgaray, quien desde la frivolidad y la
prepotencia como secretario de Hacienda aumentó impuestos y endeudó al
país, y ahora Agustín Carstens, con grosera irresponsabilidad, avienta
el cargo de gobernador del Banco de México para el que pidió ser
reelecto hasta el 2021.
Esta huida de los supuestos custodios de la “estabilidad financiera” de México revela el desastre de las finanzas públicas, que no puede atribuirse –como comienza a ser la justificación– a la victoria de Donald Trump en Estados Unidos, sino a una pésima conducción de la política económica del país desde hace años, cuyas responsabilidades son compartidas.
Si Carstens consintió el aumento de la deuda pública hasta 50.5% del
Producto Interno Bruto (PIB) que dispuso Videgaray, ahora se perfila
algo peor: Que el operador de este endeudamiento desde la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público (SHCP), Alejandro Díaz de León, se convierta
en el nuevo gobernador del Banco de México.
Díaz de León fue titular de la Unidad de Crédito de la SHCP y como
tal autorizó las solicitudes de créditos que dieron lugar al gigantesco
endeudamiento, pero en noviembre Peña lo propuso –y el Senado lo
ratificó– para que, a partir del 1 de enero de 2017, sea vicegobernador
del Banco de México y es el principal prospecto para sustituir a
Carstens.
De materializarse este proyecto, que trama José Antonio Meade,
secretario de Hacienda, el Banco de México se convertiría de facto en
otra subsecretaría de la SHCP. Sólo habría algo peor: Que Videgaray sea
la carta de Peña para el Banxico.
En medio de todas estas truculencias se encuentra un país devastado
económicamente y con un futuro sombrío para los próximos años: Inflación
más alta, nulo crecimiento, altas tasas de interés y un peso más débil
ante el dólar y el euro.
Desde ahora se anticipa que, en el mejor de los casos, México crecerá
este año 2% y no el 4.9% que ofreció Peña una vez aprobadas sus
reformas. Para el 2016 ocurre lo mismo: Prometió crecimiento de 5.2%,
pero si acaso 1.7%.
Es cierto, el salario mínimo aumentará a partir de enero casi 10%: Sube 7 pesotes al pasar de 73.04 pesos a 80.04. Inaudito.
Quién puede tener dudas: Además de corruptos, irresponsables e ineptos. Y la ineptitud, ya se sabe, es también corrupción…
Apuntes
La disputa por el PAN se torna cada vez más cruenta. Es a navaja
limpia. El escenario es el proceso para la renovación del Consejo
Nacional, el máximo órgano de dirección de ese partido, que definirá el
método para la candidatura presidencial. Este domingo 4 se celebraron
elecciones de consejeros nacionales en 16 estados y afloraron prácticas
de defraudación para favorecer a Margarita Zavala, Ricardo Anaya y
Rafael Moreno Valle. Este último aplastó a lo que queda de oposición y
arrasó en Puebla: El gobernador, que dejará de serlo en febrero, será
uno de los consejeros, junto con la diputada federal Genoveva Huerta
Villegas, Pablo Rodríguez Regordosa, presidente en Puebla capital, y su
esposa Mónica Rodríguez. La jefa del PAN en el estado, que es la esposa
de Moreno Valle, Martha Erika Alonso, minimizó –faltaba más– las
impugnaciones: “Hemos dado muestra de lo que es Acción Nacional en su
esencia”. En San Luis Potosí, el grupo de Anaya también logró “carro
completo”, teniendo como operador al presidente estatal, Xavier Azuara.
Panistas de varios municipios denunciaron las “malas prácticas” del
dirigente que “llegaron al punto de cinismo” de negar el voto a
militantes, “rasurarlos” del padrón, acarrearlos y a otros encerrarlos
para que no fueran a votar…
Fuente: Proceso
Fuente: Proceso