jueves, 31 de diciembre de 2015

Respuesta a Navarrete Prida

La Jornada - El Correo Ilustrado / 31 Diciembre 2015.
En relación con la nota publicada ayer en este diario; es necesario refutarle al secretario de Trabajo y Previsión Social, Alfonso Navarrete Prida, que el problema laboral en México se centre en la informalidad de los trabajadores. El espectro es en un marco más grande que se ubica principalmente en la reforma laboral, donde la punta del iceberg es el outsourcing, que de entrada rompe con lo estipulado en el artículo 123 constitucional.
Pero también es necesario refrescarle la memoria a Navarrete Prida al recordarle que de acuerdo con Alfonso Bouzas, investigador de la UNAM, 90 por ciento de los contratos laborales en el país son de protección patronal, recordarle también que no de balde se dio una discusión muy amplia al respecto en la 104 convención realizada en junio pasado por la OIT, en la cual se mencionó el caso de los trabajadores de Honda de El Salto, Jalisco, como vivo ejemplo de la existencia de los contratos de protección patronal, que son una práctica esencial para las relaciones laborales auspiciadas por las instancias laborales en todos sus niveles. Ejemplos sobran de estos casos, sólo por citar dos: los trabajadores de PKC en Ciudad Acuña y la digna lucha de los trabajadores de Lexmark.
El STUHM exige a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social que cumpla con el compromiso de eliminar los contratos colectivos de protección patronal y respete los derechos de libertad sindical y libre asociación ratificados en el Convenio 87 por el Estado mexicano, ampliamente discutido en la convención de la OIT en junio pasado.
Es falso que exista paz laboral, cuando millones de trabajadores son cotidianamente explotados en las líneas de producción, sin salarios dignos, seguridad social y sin ninguna posibilidad de conformar un sindicato representativo y auténtico. Ese es en origen el principal problema que se presenta para los trabajadores de este país.
Sindicato de Trabajadores Unidos de Honda de México, Paul B. Díaz Gómez