2 abril 2014 | Noé Cruz Serrano | El Universal
Las diferentes áreas de Comisión Federal de Electricidad (CFE) están derrochando energía eléctrica con un costo de 45.8 millones de pesos (mdp) anuales por la ineficiencia y obsolescencia de los equipos que tiene en operación, los cuales presentan una antigüedad entre 15 y 20 años.
Esta situación, de acuerdo con el Proyectos de Eficiencia Energética 2014, elaborado por la Coordinación del Programa de Ahorro de Energía del Sector Eléctrico (PAESE), provoca que las áreas de generación, transmisión y distribución de electricidad consuman más energía de la prevista.
La paraestatal reconoce que está perdiendo energía por el uso de equipos obsoletos como aire acondicionado, control de temperatura en gabinetes de control, iluminación, aislante térmico, sistemas de aire comprimido, calentadores de agua solares, sistemas de enfriamiento de transformadores de potencia y domos solares.
Se estima, por ejemplo, que la CFE dispone de aproximadamente 10 mil instalaciones de varios tipos, características y tamaños, destacan edificios divisionales, subestaciones eléctricas, centros de atención a clientes, centrales de generación y campamentos, de las cuales 60% utilizan aire acondicionado.
Esto significa que en la paraestatal operan 6 mil equipos de aire acondicionado, los cuales requieren ser sustituidos urgentemente, dada sus precarias condiciones.
Hasta ahora sólo se han sustituido 500 unidades, según se desprende del informe PAESE, lo que significa que con los apoyos otorgados por la Secretaría de Hacienda para la realización de proyectos de ahorro de energía, se ha cubierto el 10% del total de instalaciones con las que cuenta CFE.
En el área de Generación, en usos propios, “está desaprovechando recursos energéticos por 5.8 millones de kilowatts-hora (kwh) en el consumo anual, que equivalen a costo de 10.6 mdp anuales.
El problema radica en que la mayoría de las Centrales de Generación, cuenta con equipos auxiliares en los usos propios, con una antigüedad superior a los 15 años, por lo que su vida útil prácticamente ya caducó.
En los sistemas de distribución se considera muy importante la reducción de pérdidas en circuitos de media y baja tensión, para ello se han diseñado estrategias de ahorro de energía eléctrica para reducir en lo posible, las pérdidas en los conductores, en subestaciones y en cuartos de control.
