19 febrero 2013 | Redacción | Reforma
Ciudad de México (19 febrero 2013).- Una juez federal desechó la demanda mercantil con la que el Gobierno busca recuperar los 32 millones de dólares que se pagaron a la empresa FGG Enterprises a cambio de tres turbogeneradores para una planta termosolar, que nunca fueron entregados a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Concepción Martín Argumosa, juez Séptima de Distrito en Materia Civil, notificó el 6 de febrero el desechamiento la demanda especial mercantil promovida por el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext) contra FGG, con la que se buscaba recuperar tanto los 32 millones de dólares que se pagaron a FGG como adelanto en julio de 2010, como las penalizaciones por incumplimiento del contrato, para un total de 44.3 millones de dólares.
Para la juzgadora, la vía especial mercantil intentada por Bancomext no fue la correcta, tal y como argumentó FGG al plantear un incidente en el que solicitó el desechamiento.
"Se dejan a salvo los derechos de la parte actora para que promueva en la vía y forma correspondiente", agregó la jueza en su sentencia, que hasta ayer no había sido apelada por bancomext.
Ya sea que se opte por presentar una nueva demanda en la vía correcta, o que se insista en la vía especial mercantil apelando la resolución de la jueza Martín, el proceso para recuperar los recursos se atrasará sensiblemente, pues se perdieron casi nueve meses de litigio.
El banco fue el encargado de presentar la demanda en mayo de 2012, semanas después de que CFE le rescindió el contrato a FGG, porque es el fiduciario del fideicomiso del que salieron los recursos, que fueron aportados por la empresa paraestatal.
En diciembre de 2009, funcionarios de la CFE presentaron al Comité Técnico del Fideicomiso una nota para justificar un convenio modificado del contrato original con FGG.
En dicho convenio, se eximió a la empresa de presentar una carta de crédito irrevocable como garantía, y a cambio se aceptó que los turbogeneradores que entregaría, quedarían en prenda en caso de incumplimiento.
El problema es que las turbinas estaban en poder del consorcio japonés Mitsubishi Power Systems, que nunca las entregó a FGG porque ésta sólo le pago 18 millones de dólares y también se negó a entregarlas cuando la juez las requirió como parte de la ejecución de la prenda.
"La baja confiabilidad de la prenda con la cual se pretendió garantizar el cumplimiento de las obligaciones del contrato FAGP-001/2009, pues los bienes otorgados en garantía prendaria no eran propiedad de quien los otorgaba en tal calidad, generó que el fideicomiso y la propia CFE quedaran en incertidumbre jurídica para reclamar a FGG Enterprises", explicó la SFP en el citatorio girado en diciembre a un funcionario involucrado.
La CFE anunció el 3 de febrero que este mes convocará a nueva licitación para comprar otros tres turbogeneradores para la planta termosolar Agua Prieta II.
Fuente: Reforma
