lunes, 12 de septiembre de 2011

Hágase la luz... (Y la luz se hizo…más cara)

Salvo a los empleados de la Comisión Federal de Electricidad, al resto de los mexicanos nos han llegado de repente recibos abultados por consumo de energía eléctrica
11 septiembre 2011 | (reportaje La Prensa)
El hecho, cada vez más frecuente, es para algunos el anticipo de lo que vendrá enseguida: la eliminación del subsidio y la privatización del sector eléctrico del país.
Instituciones públicas, como la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor ya recomiendan a los usuarios tener mayor conocimiento de lo que representan las distintas cifras que se incluyen en los recibos bimestrales.
Vigilar el propio consumo significa un importante ahorro en dinero y en dolores de cabeza. La mayor parte de los mexicanos no tienen la cultura de vigilar los medidores para saber cuál es su consumo y cuánto tendrá que pagar al finalizar los dos meses.

Mediante la Revista del Consumidor, la PROFECO hizo llegar en el mes de septiembre una serie de datos que pueden ayudar a ser más eficientes en el consumo del fluido y evitarse pagos estratosféricos.

Se explica que en ocasiones, la diferencia en un solo kilowatt-hora de consumo permite a la CFE aplicar cobros de varios cientos de pesos más.

EL RECIBO
Para empezar, en la Revista del Consumidor de septiembre se mencionan los siguientes datos contenidos en los recibos: -Nombre: Nombre del usuario. -Número de servicio: Estos son los datos que identifican al usuario ante la empresa.

-Número de medidor: Código de letras y números que identifican el medidor instalado en una vivienda o en un negocio. -Lectura anterior: Indica el número de kilowatts-hora registrados en el medidor a finales del bimestre anterior.

-Lectura actual: Indica la cantidad de kilowatts-hora registrados en tu medidor en la lectura más reciente. -Multiplicador: El resultado de la resta de las lecturas se multiplica generalmente por uno.

-Consumo: Es la diferencia entre la lectura anterior y la actual, e indica el número de kilowatts-hora que consumió el usuario en el último bimestre.

-Período de consumo: Muestra la fecha inicial y final del consumo de energía eléctrica registrado. -Días: El número de días que se cobran.

-promedio diario: Esta cifra da una idea del promedio de kilowatts-hora que se consumió cada día durante el último bimestre. -Historial de consumo: Si se necesitan referencias o comparaciones para observar la tendencia de consumo, se puede consultar esta sección con los datos de consumo de los bimestres anteriores.

-Costo de producción: Indica el costo real de la enegía que se consumió. -Aportación gubernamental: Es la diferencia entre el costo real y el total a pagar, se le denomina subsidio.

-Fecha límite de pago: Es el plazo para evitar la suspensión del servicio. -Avisos: En el recibo se publican periódicamente tips de ahorro, eventos deportivos o culturales o programas que ofrece la CFE.

También se notifica si el consumo del recibo es estimado porque no se pudo tomar la lectura, entre otros detalles. -Número de servicio: Estos doce dígitos identifican al usuario para qur realice operaciones como pago en bancos o en los cajeros automáticos de la CFE, para consultar el importe y fecha límite de pago.

-Cantidad total a pagar por el bimestre: Es la cantidad de dinero neta que debes pagar, con impuestos incluidos por el servicio de energía eléctrica.

-Uso: Indica si el uso es doméstico o comercial, y por lo tanto, un tipo de tarifa. -Tarifa: Con este número se identifica la tarifa que se aplica a la hora de calcular el consumo de energía eléctrica.

Las tarifas eléctricas se clasifican de acuerdo al promedio de temperatura y son diferentes en distintos puntos de la República Mexicana. -Cálculo de facturación (ejemplo en tarifa 1): Los primeros kilowatts-hora que se consumen (150 en esta tarifa) tienen el precio más bajo.

-Concepto intermedio: Si se rebasa el consumo básico, los kilowatts-hora que siguen se cobran a un mayor precio. Incluso si se rebasa el consumo intermedio se cobrará con base en una tarifa doméstica de alto consumo (DAC) y el costo de los kilowatts extra será bastante más alto, pues mientras más se consuma, menor es el subsidio.

-Información de identificación SHCP: El sello y la cadena digital son para identificación exclusiva ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

-Talón de caja desprendible: El código de barras que viene en el talón sirve para pagar en instituciones bancarias y centros comerciales autorizados.

DOBLETE
De un mes a otro, un usuario puede recibir una cuenta de luz del doble o más que el bimestre anterior. Esto se debe, según la Procuraduría Federal del Consumir, a que existen límites en el consumo del servicio subsidiado.

Con sólo pasarse un kilowatt-hora de ese límite, la Comisión Federal de Electricidad aplica otra tarifa, que puede ser mucho mayor.

Para fines de distribución y cobro del consumo eléctrico, el país se ha dividido en ocho regiones, cada una con una tarifa diferente, de acuerdo con el promedio de temperaturas que se registran.

De esta forma, la tarifa 1 se aplica en aquellas regiones con temperaturas menores a 25 grados centígrados. -La tarifa 1A, a las zonas con una temperatura media mínima de 25 grados.

-La 1B, con un promedio de 28 grados centígrados. -La 1C, aplica en regiones con 30 grados centígrados en promedio. -La tarifa 1D, en zonas con 31 grados centígrados.

-La 1E, 32 grados. -La 1F, 33 grados centígrados. El límite para que un usuario entre a la tarifa de alto consumo (TAC), es el siguiente. -Para la tarifa 1, hasta 500 kilowatts-hora por bimestre.

-Tarifa 1A, hasta 600 Kw-h por bimestre. -Tarifa 1B, hasta 800 Kw-h por bimestre. -Tarifa 1C, hasta 1,700 kilowatts-hora por bimestre. -Tarifa 1D, hasta 2,000 kilowatts-hora por bimestre.

-Tarifa 1E, hasta 4,000 kilowatts-hora por bimestre. -Tarifa 1F, hasta 5 000 kilowatts-hora por bimestre. La dependencia advierte que el precio del kilowatt-hora cambia por bimestre, así que los datos aportados funcionan sólo como referencia.

Adicional a las tarifas y consumos mostrados anteriormente, la PROFECO indica que existen dos categorías establecidas en base a ciertos límites de consumo, de esta manera, en la categoría 1 existe el consumo básico que tiene un precio de 0.721 pesos por cada uno de los primeros 150 kilowatts-hora (cuota del mes de junio del 2011 para la tarifa 1).

En consumo intermedio, el costo es de 0.870 pesos por cada kilowatt-hora adicional. En la categoría 2, el consumo básico tiene un costo de 0.721 pesos por cada uno de los primeros 150 kilowatts-hora; de 1.205 pesos por cada uno de los siguientes 100 kilowatts-hora y de 2.545 por cada Kw-h adicional a los anteriores.

Es decir, que cuando se rebasan ciertos límites, la Comisión Federal de Electricidad cobra una tarifa más elevada y el recibo viene más abultado.

Finalmente, la PROFECO, en la edición de septiembre de este año de la Revista del Consumidor da ejemplos de consumo para usuarios a los que se aplica la tarifa 1 (a junio del 2011).

Así, si un usuario consumió 280 Kw-h, el importe sin IVA será de 221.25 pesos, el cual se considera como un consumidor de categoría 1 intermedio.

Si se consumen 281 Kw-h, la facturación sin IVA se eleva hasta 307.55 pesos (la diferencia entre el último kilowath-hora gastado equivale a 86.30 pesos).

Se trata de un consumidor de categoría 2 al que se le cobra por kilowatt-hora excedente. Un consumo de 500 kilowatts arroja un cobro de 864.90 pesos (hasta aquí se cobra la tarifa 1).

Si se consumen 501 kilowatts-hora bimestrales, nuevamente se dispara, con un recibo de 1,911.40 pesos (empieza la tarifa DAC, y en este caso, la diferencia por sólo un Kw-h es de más de mil pesos).

Tras lo anterior, la recomendación de la Procuraduría del Consumidor es que el usuario tenga conocimiento de la tarifa que se aplica en su región (en el caso de Reynosa, es la más elevada, la 1F), los límites de consumo y la vigilancia constante del propio consumo, para evitar sorpresas desagradables.

AHORRO ENERGETICO
La PROFECO también indica cómo ahorrar energía eléctrica. -Mediante la revisión de la instalación eléctrica, para vigilar que no haya fuga de energía, para lo cual, se recomienda desconectar todos los aparatos de la casa y verificar que el disco del medidor no avance.

Si avanza, llamar a un técnico para que repare cualquier problema en la instalación eléctrica. -Utilizar la máxima capacidad de la lavadora y utilizar un detergente adecuado, ya que demasiada espuma forza el motor de la lavadora y por consiguiente, el consumo es mayor.

-Utilizar un refrigerador de bajo consumo; si se va a comprar uno nuevo, revisar cuánta energía utiliza. Revisar que los empaques estén en buenas condiciones y colocarlo en un lugar ventilado y fresco.

Desconectar y limpiar el refrigerador por lo menos cada dos meses. No introducir alimentos calientes. -Cambiar los focos normales (incandescentes) por focos ahorradores de energía, ya que gastan un 75% menos.

Pintar el interior de la vivienda con colores claros para mayor refracción de la luz. Apagar los focos que no se utilicen y en la medida de lo posible, aprovechar la luz natural.

-Procurar que el equipo de aire acondicionado sea adecuado a las necesidades. No dejar abiertas puertas o ventanas mientras se utiliza. Darle mantenimiento constante, limpiar los ductos y cambiar los filtros.

-Organizar el tiempo de planchado, ya que la plancha consume más energía cuando se enciende que cuando está caliente. -Mantener limpio el horno de microondas, el tostador de pan y otros aparatos electrodomésticos.

Hasta aquí las recomendaciones de PROFECO para cuidar el consumo de energía y prevenir los “superrecibos” que en ocasiones pueden rebasar los cinco mil pesos bimestrales, o como en un caso denunciado en LA PRENSA, ¡hasta de 20 mil pesos!

¿SIN SUBSIDIO?
Ahora bien, la producción de electricidad es demasiado cara y hay varias formas de obtenerla: mediante la combustión de turbo gas y ciclo combinado, mediante el diesel, vapor por combustóleo, carboeléctrico y dual (carbón y combustóleo), geotermoeléctrica, ecoeléctrica, nuclear e hidroeléctrica.

En el 2008, producir un kilowatt-hora por medio de turbo gas, tenía un costo de 1.38 pesos, con diesel, 7.85 pesos, con vapor, 1.58 pesos, con el método dual, 1.10 pesos, mediante la geotermia (géisers, aguas termales), 0.59 pesos, por el método ecoeléctrico, 0.74 pesos, nuclear, 0.92 pesos e hidroeléctrica, 0.40 pesos.

Estas son las tecnologías usadas en México para producir electricidad, y su costo en el 2008. Ahora bien, las cuatro primeras usan combustible fósil; el vapor, la geotermia, la ecoeléctrica y la hidroeléctrica, son amigables con el medio ambiente, son muy baratas pero sólo aportan un poco más del 1% del total de la energía que se usa en el país.

Por otro lado, la energía nuclear, a pesar de tener un bajo costo de producción, contamina con desperdicios, los cuales son difíciles de manejar.

La Estrategia Nacional de Energía 2011-2025, establecida por la Secretaría de Energía (septiembre 10 del 2011), señala que “el sector energético en México es un componente esencial de la economía nacional y uno de los factores clave que inciden en el desarrollo productivo y social del país.

La participación del sector en las finanzas públicas, así como en el desarrollo de infraestructura y capital humano, hacen de vital importancia que se tenga claridad sobre su futuro en el mediano y largo plazos”.

Los componentes de esta estrategia son: El fortalecimiento institucional, acopio de recursos financieros, desarrollo tecnológico y capital humano, colaboración internacional, contenido nacional y programas de difusión.

Los objetivos: -Restituir reservas, revertir la declinación de la producción de crudo y mantener la producción de gas natural. -Diversificar las fuentes de energía, incrementando la participación de las tecnologías limpias.

-Incrementar los niveles de eficiencia en el consumo de energía. -Reducir el impacto ambiental del sector energético. -Operar de forma eficiente, confiable y segura la infraestructura energética.

-Ejecutar oportunamente las inversiones necesarias en capacidad de procesamiento para reducir el costo de suministro del energético. -Fortalecer la red de transporte, almacenamiento y distribución de petrolíferos.

-Proveer de energéticos de calidad y a precios competitivos a los centros de población marginados del país. La SENER da a conocer los porcentajes de energía eléctrica que consume cada sector, y de esta manera, el agropecuario dispone de 1 a 5%, el residencial, comercial y público del 15 al 19%, el industrial del 26 al 30% y el de transporte, del 50 al 54%.

Señala el documento que entre 1999 y 2009, el consumo energético en México creció de manera sostenida, a una tasa anual del 1.8%, impulsado principalmente por el consumo en el sector transporte, cuya tasa de crecimiento fue de 3.7%.

Con la Estrategia Nacional de Energía 2011-2025 se establecen las bases para la privatización, y, por ejemplo, hay indicios de que el subsidio que se otorga durante los meses de mayor calor, va a desaparecer, o ya desapareció, de hecho.

Constantino Soto Patiño, Coordinador de la Casa del Movimiento para la Defensa de la Economía Familiar, asegura que personas han acudido a su oficina con recibos donde se señala que la tarifa se aplica sin apoyo gubernamental o subsidio, aún cuando se supone que el horario de verano concluye hasta el mes de noviembre.

Otro dato: Según la Casa del Movimiento, tal es el descaro de la Comisión Federal, que incluso ha subcontratado a empresas para que entreguen los recibos a los usuarios domésticos.

Una de ellas es la empresa con la razón social VILLYSA, Transporte y Construcciones, que no tiene nada que ver con el sector eléctrico, pero igual se dedica a entregar recibos y a cobrar un disimulo por no cortar el servicio a los morosos.

Una segunda compañía privada de nombre Zayra realiza prácticas parecidas, cobrando hasta 300 pesos a los usuarios para que no paguen la reconexión.

La Estrategia Nacional de Energía señala, en uno de sus principales anexos, que se promoverá penalizar el robo del fluido a través de los llamados “diablitos”.

De esa forma, el robo de energía eléctrica pasará a ser un delito federal grave y se pagará con pena corporal sin derecho a fianza.

Mientras son peras o son manzanas, los abultados recibos que envía cada semestre la CFE a los hogares de los reynosenses están quitando el sueño a muchos padres de familia.

Resulta difícil, si no imposible, ganarle un caso a la Comisión de Electricidad, cuando llegan recibos de cinco, diez, quince o veinte mil pesos por bimestre.

Lo más que puede hacer el usuario es acudir a la Procuraduría Federal del Consumidor y ahí le darán la alternativa de hacer un convenio, el cual consiste en varios pagos parciales hasta cubrir el adeudo total.

¿Qué va a pasar si desaparece el subsidio o si se privatiza la CFE? Seguramente el uso de la energía eléctrica en los hogares será un lujo que muy pocos podrán darse.